Lo que parecía una historia de terror o un futuro distópico, digno de algún blockbuster de Hollywood, ahora es una realidad.
¿Por qué van a huelga?
La decisión de frenar las actividades y no llegar a un acuerdo con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP, en inglés) se da por diferentes motivos, principalmente los famosos 'residuals' y la Inteligencia Artificial.
El primer punto referencia los pagos adicionales que los grandes estudios de Hollywood, y ahora las gigantescas plataformas de streaming, deben abonar a los profesionales del entretenimiento cada vez que se vuelve a emitir alguno de los títulos en los que han trabajado.
SAG-AFTRA y WGA exigen que, ante el boom de contenidos en la red, se aumente esa tarifa y que esté sujeta al número real de reproducciones acumuladas.
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El sindicato de actores ha evidenciado repetidamente su preocupación sobre el uso de la Inteligencia Artificial en la industria del entretenimiento, algo que consideran un 'cambio radical' y una 'amenaza existencial' para su trabajo.
Los actores dicen que con el auge y el impacto de la IA se crea un escenario en el que actores falsos y muertos podrían ser las estrellas del mañana a través de rostros y voces generados por computadora.
¿Qué sucede con la huelga?
El gran interrogante con el comienzo de una huelga histórica es ¿qué pasará con las películas que se están rodando y aquellas que están por estrenarse? Y aunque el escenario es incierto, de a poco se ha ido conociendo cuál será el impacto de este cese de actividades.
Primeramente, los intérpretes dejarán de hacerle promoción a las cintas que están ad portas de estrenarse. Tal es el caso del elenco de Oppenheimer, del director Cristopher Nolan, que abandonaron la premiere en Londres como apoyo a la huelga. Asimismo se prevé que blockbusters como Barbie no tengan más eventos de este tipo.
Formatos tan aclamados por los espectadores como Stranger Things, Abbott Elementary o Severance ya se han paralizado.
Un contexto que se extiende también al ámbito de la gran pantalla, en el que filmes tan esperados, como Gladiador 2, tuvieron que parar su producción; la secuela de Beetlejuice puso en pausa su rodaje; y Misión Imposible - Secuencia Mortal parte 2 no podrá retomar su producción momentáneamente. Deadpool 3 también corrió con el mismo destino. También peligra la realización de eventos de talla internacional como los premios Emmy, hasta ahora pactados para el 18 de septiembre, y la Comic-Con de San Diego, prevista para el próximo jueves.
Los estudios se defienden
La Alianza de Productores de Cine y Televisión (Amptp), que representa a los estudios de cine y plataformas de streaming, calificó la declaración de huelga por parte del Sindicato de Actores de Hollywood (SAG-Aftra, en inglés) como un 'resultado' que no era el esperado.
'Una huelga no es el resultado que esperábamos, ya que los estudios no pueden operar sin los artistas que dan vida a nuestros programas de televisión y películas (...) Un camino que conducirá a dificultades financieras', aseguró la Amptp en un comunicado de prensa difundido mientras los intérpretes oficializaban el paro.
