En la actualidad la salud metabólica se ha convertido en un tema de amplia importancia debido a los altos índices de enfermedades relacionadas con el metabolismo, como la diabetes tipo 2 y la obesidad.
Por ende, es imprescindible adoptar rutinas alimenticias y físicas que favorezcan a un buen funcionamiento metabólico.
Tomando en cuenta lo anterior, es necesario definir que el metabolismo es el sistema que impulsa a todo en el cuerpo. Este es influenciado por distintos factores como la edad, la composición corporal, la cantidad de actividad física y los niveles de estrés, entre otros.
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Para conocer mejor todos sus secretos, EL HERALDO contactó a los nutricionistas Rubén Orjuela, Geraldine Calleja y a la doctora Claudia Sánchez especialista en gastroenterología, quienes hablaron sobre cinco principios en la rutina diaria que ayudarán obtener una excelente salud metabólica.
“Hay varios factores que pueden influir en el metabolismo como la genética, los problemas hormonales y la composición del cuerpo. No hay alimentos que logren acelerarlo o ralentizarlo. Sin embargo, se pueden organizar platos para equilibrar una dieta diaria que contribuya a la pérdida de peso”, explicó la nutricionista Geraldine Calleja.
Un buen consumo de proteína
La proteína desempeña un papel significativo en los procesos corporales. No obstante, las personas no son conscientes de que deben incluirlas en mayor cantidad en los platos del día.
Según un estudio realizado en el 2019 en Estados Unidos, el 46 % de los participantes mayores del estudio no consumían las suficientes proteínas en sus dietas.
Por su parte, la gastroenteróloga Claudia Sánchez dijo que un buen consumo de proteínas favorece el mantenimiento de la masa muscular, lo que se relaciona con tener una mejor capacidad para las actividades físicas. “Los músculos también son uno de los principales consumidores de glucosa, especialmente durante el ejercicio, y son el principal tejido que ayuda a proporcionar sensibilidad a la insulina”.
La experta agregó que la proteína igualmente fortalece los músculos, y los mismos ayudan a mantener un metabolismo saludable.
Algunas de estas proteínas son: el pollo, el pavo, pescados, mariscos, el huevo, el cerdo y las legumbres.
Excelentes fuentes de energía
Además de las proteínas, otros alimentos también ayudan a mantener la energía que el cuerpo requiere para darle un impulso al metabolismo a corto plazo.
“La grasa es importante para el organismo y el metabolismo, no solo porque es una fuente de energía, sino porque también es la base para producir hormonas, aporta vitaminas liposolubles como la A, D, E y K, todas ellas necesarias para el buen funcionamiento del organismo”, dijo el nutricionista Rubén Orjuela.
El especialista anotó que las grasas recomendadas para consumir con tranquilidad, se encuentran en los aguacates, la mantequilla de maní natural, las nueces, el queso y la grasa de cerdo.
Los vegetales y los colores
Optar por una dieta arcoíris consiste en incluir en la alimentación diaria frutas y verduras de diferentes colores para aprovechar todos sus nutrientes, también es clave.
“Añadir todos los colores y verduras sin almidón a las comidas mejora el aporte de antioxidantes, vitaminas y minerales, así como fibra para una mejorar la microbiota, salud digestiva y metabólica”, dijo Claudia Sánchez.
Cuando se consumen primero las verduras, hay una menor probabilidad de que los niveles de glucosa aumenten después de la comida. Hacerlo de otro modo puede entorpecer un poco el proceso de digestión.
¿Se puede consumir postres?
No es necesario eliminar todos los postres cuando se empieza a trabajar por cambiar un metabolismo. Si se está acostumbrado a incluir dulces después cada comida, sería interesante sustituirlos por algunas frutas dulces como el banano o las fresas o se puede reducir el tamaño de las porciones de los postres.
“El objetivo es hacer cambios que sean realmente sostenibles para que aquellos que están empezando a comer saludable, no abandonen el proceso”, dijo Calleja a EL HERALDO.
Complementar con ejercicio
Aunque la principal responsable de la perdida de peso es llevar una buena alimentación, el complemento perfecto para lograr el objetivo de acelerar el metabolismo, es hacer algún tipo de movimiento o actividad física.
“La buena nutrición y la actividad física están relacionadas. Al hablar de metabolismo, según estudios de la OMS, los adultos deben acumular un mínimo de entre 150 y 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada y realizar actividades de fortalecimiento muscular para trabajar todos los grupos musculares principales”, explicó Rubén Orjuela.
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El experto en nutrición sostuvo que en vez de caer en un reposo de energía después de almorzar, se debe considerar hacer un poco de actividad física antes y después de comer.
También salir a caminar durante 10 o 20 minutos después de una comida puede ser muy útil para el cuerpo.
“Cada persona puede tener necesidades nutricionales específicas; por eso contar con la orientación de un profesional de la salud facilitará el camino hacia la mejora de la salud metabólica”, dijo Sánchez.





















