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¿Cómo sería una vida sin mascotas? La respuesta a esta pregunta seguramente sería que “triste” pues las personas a lo largo del tiempo han considerado a las mascotas como parte de su familia y, un requisito indispensable para vivir con más amor sin que les pidan algo a cambio.

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Hay estudios que señalan que la tenencia de mascotas pero particularmente perros y gatos, ayuda a reducir el estrés y evitar las enfermedades cardiovasculares.

Además, manifiestan que ayuda a prolongar la vida del ser humano, porque tener una mascota fortalece el sistema inmunológico y, fomenta la actividad física cuando juega con ellos.

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La American Heart Association (AHA) explica que las mascotas ayudan a que sus dueños estén mejor con respecto a la salud tanto física como emocional. Indican que pueden mejorar en el perfil lipídico y la presión arterial, y en la mejoría de la función autonómica.

Es importante recordarle que la AHA sostiene que tener mascotas no solucionará por completo las enfermedades cardiovasculares, pero sí que jugará un papel muy importante a la hora de prevenirlas.

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Ellos explican que con tan solo sacar a su mascota a hacer sus necesidades o sacarlo a pasear, también el cuidador está haciendo un ejercicio, lo que le ayuda considerablemente en la salud.

Asimismo, con el contacto constante con el perro o el gato podrá obtener un sistema inmunológico fuerte, por la cantidad de bacterias que están expuestos los animales.

Incluso, hasta los niveles de cortisol que es la hormona que regula el estrés, se puede ver controlada con el constante cariño que le brinde su mascota.

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Por último, revelan que también ayudará a que no se sienta tan solo, desarrolle habilidades sociales, y puede construir una comunidad, con dueños de otras mascotas.

Por su parte, la Asociación Americana de Psicología (APA), añade que varios estudios han arrojado como resultado que las personas con mascotas tienden a tener el autoestima más alto. También le ayuda en la organización, porque tener una mascota requiere de tener una responsabilidad bien grande, pues debe procurar tenerlo en buenas condiciones.

Específicamente, la interacción con los perros puede aumentar los niveles de oxitocina y dopamina, que son neurotransmisores asociados con el bienestar y la felicidad.