
3 herramientas de coaching
El coaching construye consciencia, faculta la elección y mueve al cambio.
El concepto está muy asociado al deporte, de allí que los atletas tienen un entrenador al que llaman coach.
Pues bien, así como en los deportes, en la vida empresarial el coach hace básicamente lo mismo: trabaja con la persona para mejorar el desempeño laborar y desarrollar sus competencias blandas.
De acuerdo con Carolina Correa, Consultora Asociada de Top Management an Odgers Partners Company, parte del poder del coaching se centra en el uso preciso y oportuno de las múltiples herramientas que ofrece esta metodología.
Asegura Carolina que al utilizarlas, el coach puede guiar el proceso hacia un auto análisis profundo, estimulando la aceptación genuina, la responsabilidad e identificando alternativas para abordar o manejar de manera asertiva la situación particular en la que se trabaja.
Entre la variedad de herramientas disponibles, existen unas más elaboradas que otras. Algunas requieren muchas horas de práctica disciplinada para aplicarlas con pericia, mientras que otras son más sencillas y prácticas de usar, sin que esto le reste importancia y contundencia.
Sobre este tema, la Consultora Asociada de Top Management, menciona 3 herramientas que se usan frecuentemente en coaching:
1.- Preguntas poderosas: a través de ellas se logra provocar la reflexión e imaginación, desenmascarar ideas limitantes, constatar fortalezas y encontrar respuestas profundas.
2.- Observación: con una observación consciente de los micro comportamientos, se evidencia lo que hay detrás de las palabras.
3. - Retroalimentación: todo feedback tiene como finalidad reforzar o mejorar comportamientos y producir cambios que impacten positivamente la capacidad de ejecución.
Un coach que sabe observar, escuchar y comunicar, contribuye a que exploremos dentro de nosotros mismos: es como si encendiéramos una linterna en nuestro interior, iluminando lugares que jamás habíamos visto y que nos movilizan hacia el lugar al cual queremos llegar.