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El hurto y vandalismo que sufrió la línea que suministra energía a los municipios de Hatonuevo y Barrancas, mantiene sin energía eléctrica a estas poblaciones de La Guajira. 

Los usuarios se han quejado en redes sociales por la falta de energía, ya que no han podido cumplir con sus actividades estudiantiles y laborales, que en su mayoría son de manera virtual debido a la pandemia. 

Desde el pasado ocho de abril se presentó el robo de ángulos metálicos que provocó la caída de cinco torres eléctricas y por ende la afectación del servicio.