Son extraños los hechos que llevaron a la muerte de Eduardo Antonio Olivares Méndez, en la madrugada de este lunes festivo 10 de junio, en la carrera 40 con calle 44, barrio El Rosario, perteneciente a la localidad Norte Centro Histórico de Barranquilla.
Las autoridades competentes han confirmado que ya se vienen adelantando las respectivas pesquisas para esclarecer todo lo relacionado con el adulto mayor de 74 años, de quien se sabe que era un contador público barranquillero.
El relato de las versiones iniciales indica que el hoy occiso llegó a un establecimiento ubicado en el sector cuando el reloj ya casi llegaba a las 2:00 de la mañana. Estaba en compañía de una mujer. Pasado un tiempo, esta misma se despide y abandona el lugar.
Olivares Méndez, quien ya estaba afuera del local, optó por sentarse en una de las sillas de la entrada. Los trabajadores del mismo sienten algo de alerta, puesto que ni si quiera se movía. Estos deciden llevarlo con urgencia al Hospital General de Barranquilla, donde médicos confirmaron que entró sin signos vitales.
Agentes de la Seccional de Investigación, Sijín, están llevando el caso. El cuerpo de la víctima no registra signos de violencia y, a la hora, no se descarta una muerte natural. Este hombre tampoco registraba anotaciones judiciales.





















