El parque Washington se llenó este domingo de niños, jóvenes y familias quienes, en un acto de solidaridad, se reunieron para donar más de 10 toneladas de alimentos con el propósito de ayudar a las víctimas de la avalancha en Mocoa, tras la tragedia del viernes 31 de marzo, en la que perdieron la vida 306 personas a causa del desbordamiento de tres ríos.
Allí, el sector gastronómico de la ciudad, liderado por las chefs barranquilleras Nancy Cabrera y Silvia Ibáñez, estuvo guiando la jornada de recolección de insumos como comidas enlatadas, desechables, cubiertos, platos cuchillos, tenedores, leche en polvo, ropa nueva y alimentos para perros y gatos. Los granos y el arroz fueron los alimentos más donados.
A las 3 de la tarde, los primeros donantes empezaron a llegar con mercados en sus manos. Kike Díaz, uno de ellos, se acercó a la zona de recolección de la mano con su pequeño hijo de 5 años. 'Traje un mercado conformado de arroz, lentejas y azúcar. Siempre hay que colaborar porque esta es una situación donde cualquiera puede estar expuesto. Hay que estar abiertos a nuestros hermanos colombianos'.

Por su parte, Esteban Díaz, hijo de Kike, invitó a otros niños para que también se animen a ayudar y añadió 'así como yo lo hice, todos tenemos que unirnos por Mocoa'.
De la misma manera, Carmen Cecilia Arce, una de las donadoras que llegó al parque acompañada de su nieta de 4 años, resaltó la importancia de los niños y de las nuevas generaciones en esta labor. 'Ellos necesitan valorar su papel en el mundo y aprender a tomar conciencia para ayudar a las personas que lo necesitan', agregó.
Luego de culminar con la recepción de donaciones, los alimentos fueron ubicados en camiones, para después ser transportados a la sede de la Cruz Roja Seccional Atlántico. Allí, el personal de esta institución se encargó de armar los mercados de acuerdo a los estándares establecidos en estas situaciones de tragedia.
Posteriormente, los alimentos serán llevados al sitio afectado por la Fuerza Aérea.
Según Patricia Mestre de Celia, presidenta de la Cruz Roja del Atlántico, este desastre ha sacado a flote la solidaridad de la juventud. 'Los colegios y sus estudiantes han acudido masivamente. En ocasiones anteriores no se veía esta ayuda. Destaco el esfuerzo de estudiantes y de jóvenes empresarios porque se han movilizado de una manera impresionante', manifestó.
De acuerdo con Nancy Cabrera, las donaciones superaron los 70 millones de pesos, un éxito que fue posible 'gracias al esfuerzo del sector gastronómico de la ciudad, porque aportaron más que un granito de arena. Además de esto, la colaboración de los barranquilleros fue estupenda'.
Igualmente, la chef María Emilia Fadul estableció que la labor también fue posible gracias a la contribución de meseros, cocineros, proveedores y estudiantes de programas gastronómicos del Sena, Gato Dumas y el centro Inca.






















