La violencia sigue ganando terreno en el fútbol colombiano. Después de la lamentable agresión verbal contra el técnico de Atlético Nacional, Jhon Jairo Bodmer, en plena rueda de prensa posterior al partido que Deportivo Cali le ganó 3-2 a los verdes paisas, en el estadio Palmeseca, el viernes anterior, un nuevo hecho reprochable se presentó con el defensa central José Aja, del Deportivo Independiente Medellín.
El zaguero uruguayo debió salir de la concentración del ‘Poderoso’ por unas amenazas contra él y su familia, según información de la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales, Acolfurpro.
'Acolfutpro rechaza las amenazas a nuestro afiliado José Aja y su familia, pedimos acciones inmediatas de las autoridades, solicitamos medidas de protección a nuestro compañero', pidió el gremio de los futbolistas al DIM, la Dimayor, la Federación Colombiana de Fútbol, la Fiscalía y el Ministerio de Deporte.
El club antioqueño emitió un comunicado en el que confirmó la salida de Aja de la concentración previa al partido contra Fortaleza, previsto para jugarse este sábado, desde las 6 p.m. Sin embargo, no usa el término amenazas. Señala que el jugador y su núcleo familiar han recibido 'mensajes de acoso'.
'El Equipo del Pueblo S.A. informa a los hinchas, medios de comunicación y público en general que el jugador José Manuel Aja no estará presente en el juego ante Fortaleza por la fecha 7 de la Liga. En las últimas semanas José Manuel y su familia han recibido constantes mensajes de acoso a través de las redes sociales', expresó el DIM en su comunicado.
'De parte del club, el cuerpo técnico y el jugador se ha decidido proteger al ser humano y su familia. La institución continuará buscando esclarecer la situación para brindar todas las garantías para el jugador y su familia', agregó.
El futbolista charrúa no ha tenido un buen comienzo de campaña con el Medellín, pero cuenta con la confianza de su compatriota y entrenador Alfredo Arias.
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Sus compañeros le mostraron respaldo a Aja y su familia sacando a la cancha una camiseta con su número antes de que empezara el juego ante Fortaleza
Este es el segundo caso de violencia que se presenta en medio de la séptima jornada de la Liga, luego de lo ocurrido en Cali con Bodmer.
























