El crimen del director de la cárcel La Modelo de Bogotá, el coronel retirado de la Policía Élmer Fernández, que fue asesinado este jueves por sicarios que lo atacaron a tiros cuando se movilizaba en un vehículo oficial por una avenida del norte de Bogotá, volvió a desnudar las serias falencias que arrastra desde hace varias décadas el sistema carcelario colombiano, que históricamente ha estado dominado por guerrilleros, paramilitares y, en la actualidad, por bandas criminales.
Fernández, que estaba en el cargo hace apenas 42 días, desde el pasado 4 de abril, no contaba con esquema de seguridad ni con vehículo blindado, pese a que semanas antes había sido amenaza de muerte por alias Pedro Pluma, sobre quien se han posado los focos tras el crimen.
Alias Pedro Pluma está condenado a cinco años de cárcel por varios delitos, entre ellos los de hurto, tráfico de armas y fuga de presos y estaba (fue trasladado) recluido en La Modelo desde hace dos años.
En este sentido, Néstor Osuna, ministro de Justicia, afirmó que en los dos últimos años se han tramitado ante la UNP, que depende del Ministerio del Interior, 506 amenazas denunciadas por funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), de las cuales 263 siguen en trámite y en 63 de esos casos “se les ha concedido la seguridad”.
“Ojalá el trámite fuera más breve”, dijo el ministro al explicar que el estudio de cada caso tarda varias semanas y que, para agilizar el procedimiento de protección, en un consejo de seguridad celebrado con el director de la Policía, general William Salamanca, y otras autoridades, se acordó “que algunos de esos cargos tengan esas medidas de protección sin necesidad de amenazas”.
El ministro añadió: “La experiencia tan terrible que hemos vivido nos indica que tenemos que aligerar (el estudio de cada caso) para que sea inmediato y probablemente tengamos que reforzar la protección a los cargos y a las amenazas darles un trámite más inmediato”.
Renglón seguido, Osuna reveló que autoridades ya tienen indicios certeros de los autores del asesinato de Elmer Fernández.
“Ya existen unos indicios certeros que próximamente van a permitir la captura y la judicialización de las personas que dieron muerte al coronel Élmer Fernández”, dijo el jefe de la cartera de Justicia.
Osuna recalcó que pese a las pocas horas que pasaron desde el homicidio las investigaciones de las autoridades “van muy adelantadas” y ya hay “varias hipótesis muy certeras” acerca de los autores.
Osuna agregó que “es un momento para actuar con cabeza fría”, aseguró que el sistema carcelario está controlado y que acciones son “retaliaciones por la contundencia y la efectividad de las actuaciones que están teniendo la Policía, la Fiscalía General y el propio sistema carcelario”.
“No vamos a dar ni un paso en falso, ni tampoco un paso hacia atrás en la persecución de estos criminales”, concluyó.
Traslados
Pedro Nel Caro, señalado de amenazar al director de la cárcel La Modelo de Bogotá Élmer Fernández, fue trasladado a la prisión La Picota, informó este viernes el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).
Además, el Inpec trasladó de la penitenciaría La Modelo a otros 14 peligrosos reclusos que irán a diferentes cárceles del país.
Antes de los traslados hubo disturbios en varios patios de La Modelo que fueron controlados por la guardia. Supuestamente los desórdenes se originaron porque los reclusos temían el traslado de varios criminales que tienen el control de sectores de la cárcel, una de las principales de Bogotá, entre ellos Caro, alias Pedro Pluma.
Hace una semana, el coronel Fernández recibió panfletos amenazantes cuyo autor supuestamente fue Caro, que cumple una condena de cinco años y seis meses por múltiples delitos.
En uno de los panfletos, que tiene una marca de alias Pedro Pluma, le advertía a Fernández que mataría a su familia si volvía a ordenar requisas en el centro penitenciario.
Cambios obligados
Luego del asesinato del director de La Modelo y la posterior renuncia del subdirector, Óscar Tovar Moreno, la mayor Nancy Pérez asumió como directora encargada del centro carcelario.
La funcionaria es mayor del Cuerpo de Custodia y Vigilancia y se ha desempeñado como directora de varias cárceles de Bogotá e Ibagué y también en Acacías, en el departamento del Meta.
“Las amenazas se presentaron directamente al señor director. Personalmente, en los dos años y medio que laboré en el instituto nunca tuve ningún tipo de amenaza. Lo acompañamos, como era nuestra obligación, en todo su trámite para la solicitud de protección y en todo el tema de incrementar los estándares de seguridad en el entorno del establecimiento”, explicó el ex subdirector a RCN.
“Nosotros estábamos desplazándonos hacia nuestras residencias después del día laboral. Yo me bajo del vehículo para tomar el servicio público porque me rendía más para llegar a mi casa. Ya cuando desciendo del vehículo, a los pocos minutos me llaman a informarme de la novedad y me desplazo al lugar de los hechos donde ya no había nada qué hacer”, agregó.
En febrero pasado el Gobierno colombiano declaró la emergencia carcelaria para enfrentar la persecución de bandas criminales a los guardianes de prisiones y combatir la extorsión que se hace desde los centros de reclusión del país, todos con un alto hacinamiento.
El Inpec administra 125 establecimientos carcelarios en todo el país con capacidad para 81.740 reclusos, pero en la actualidad albergan a 101.976 personas privadas de la libertad.
Por su parte, el senador santandereano Gustavo Moreno, del partido En Marcha, solicitó tramitar con mensaje de urgencia una reforma carcelaria tras el asesinato del director.
“Parecería que la ley y el derecho a la vida está en manos del crimen. Amenazas en centros carcelarios. Lo que no puede seguir pasando es un plan pistola que asesine a funcionarios mientras nos cruzamos de brazos. El Gobierno debe despertar y actuar. No podemos dejar solo al Inpec”, pidió el legislador.
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“La crisis carcelaria no aguanta un consejo más; Hoy los delincuentes mandan en los centros carcelarios; las cárceles se convirtieron en universidades del crimen y delincuencia; cárceles productivas ya!”, agregó.
Además, el senador criticó la falta de medidas de protección que tienen en la actualidad los directores de cárceles del país.
“El director de la cárcel había sido amenazado la semana pasada con un panfleto; también había pedido protección. ¿Por qué la UNP no le dio la protección? ¿Por qué el director no estaba escoltado por guardias del Inpec?”, recriminó.
Teorías
Aunque alias Pedro Pluma es el principal sospechoso del crimen de Élmer Fernández, las autoridades no descartan dos frentes de investigación: la injerencia en el crimen de alias Pipe Tuluá, líder de la banda delincuencial La Inmaculada, y la banda trasnacional del Tren de Aragua, que buscaría adueñarse de algunos patios de la cárcel La Modelo.
Sin embargo, hasta ahora la Policía no ha entregado mayores detalles sobre estas líneas.
