Sharol Arias Martínez, fue enviada a prisión por el Juzgado Segundo Penal Municipal de Control de Garantías de Valledupar, como sospechosa de participar en la desaparición del niño Jhosuar David Mejía Gil, de quien no se tiene conocimiento hace más de un año. La madre del menor de edad, Angélica Gil, también se encuentra presa.
Según la investigación, la madre de la víctima, quien ya fue judicializada, al parecer, llegó en una motocicleta hasta un sector cercano donde vivía el menor de edad con los abuelos, y sin previo aviso se lo llevó.
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“Se pudo establecer que la hoy procesada, previa concertación con la madre de niño, la espero en una zona cercana a la terminal de transportes, desde donde, se presume, salieron con rumbo desconocido. Hasta el momento se desconoce el paradero del niño”, indicó el ente acusador en el proceso de las audiencias concentradas.
Asimismo indicaron que la procesada ha sido consultada por las autoridades en varias ocasiones sobre el paradero del menor, sin embargo, no ha entregado información, por ello la Fiscalía le imputó el delito de desaparición forzada agravada, cargo que no aceptó.
José Carlos Martínez, abogado de la defensa de Arias Martínez, ha indicado que la inferencia razonable que alega la Fiscalía y que fueron considerados a bien por el juez, ha sido edificada mediante indicios, “Es una modalidad permitida en el estatuto penal y se ha desarrollado en la jurisprudencia, la Corte ha marcado una línea frente a esos temas y por ello le permitieron a la juez que Sharol pudo haber participado en los hechos que se investigan”.
También indicó que a su cliente, al parecer, le habían enviado un mensaje por Facebook, en el cual la amenazaban indicando que la estaban esperando en la Cárcel Judicial para ‘darle su merecido’. Por ello, la Fiscalía solicitó que la medida de prisión fuera en la Cárcel El Buen Pastor de Barranquilla, para salvaguardar la integridad de la procesada.
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Este caso se ha convertido todo un misterio para las autoridades, dado que a lo largo de este año, desde el 12 de mayo de 2024, no han logrado dar con el paradero del niño de 5 años, sacado de su entorno en el barrio Nuevo Milenio de Valledupar, por su madre Angélica Arias, y desde entonces no se sabe nada sobre él. Ambas mujeres han guardado silencio, han entregado versiones contrarias o han negado su participación en la desaparición.
