El gobernado de Bolívar, Yamil Arana Padauí, reveló este lunes 4 de agosto que la crisis de orden público en el sur de Bolívar se agudiza y mantiene confinadas a más 2 mil familias en el municipio de Montecristo, y otras 5 mil personas en Santa Rosa, zonas donde las tropas de la Primera División del Ejército Nacional se enfrentan no solo a la guerrilla del ELN sino también al Clan del Golfo.
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De acuerdo con el mandatario departamental, los grupos insurgentes declararon “paro armado en la zona de Santa Rosa del Sur”, por lo que no se han permitido el ingreso de alimentos.
“Tenemos paro armado en la zona de Santa Rosa del Sur, Lleva más de 7 días sin dejar entrar alimentos”, dijo Yamil Arana en diálogo con ‘La FM’.
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“Esta es una zona donde el ELN ha tenido control de la minería (…) es una zona llena de oro, y el oro es el principal financiador de las estructuras armadas organizadas”, agregó.
Arana indicó que ante la situación se acordó un corredor humanitario entre la institucionalidad y la comunidad.
“Vamos a tratar esta semana de comprar más alimentos para entrarlos a esa zona del departamento”, explicó.
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En las últimas horas la Defensoría del Pueblo emitió una alerta sobre la situación que afrontan los pobladores de los corregimientos La Mariposa, San Lucas, Canelos, Villaflor, Fátima y Buenavista. Le exige la entidad a los grupos ilegales que cesen toda acción que ponga en riesgo la vida e integridad de la población civil.
“La Defensoría del Pueblo apoya el reclamo de la población del municipio de Santa Rosa por el respeto a la vida y al Derecho Internacional Humanitario. Instamos a los grupos armados ilegales a cesar de manera inmediata toda conducta que ponga en riesgo la vida, la integridad de la población civil, sus bienes y que afecte su movilidad”.
Indica la Defensoría que la magnitud de la emergencia exige la respuesta inmediata del Gobierno Nacional a través de la Unidad de Víctimas con las autoridades locales en aras de ofrecer la atención humanitaria que se requiere.