90 de los 90: Mylene de Forero, una vida dedicada a la prevención y detección del cáncer

En 1986, en medio de la consternación e incertidumbre que sintió al enterarse de que su padre padecía de cáncer de pulmón, una joven llegó hasta las instalaciones de la Liga Contra el Cáncer Seccional Atlántico en busca de ayuda para el ser que más ha amado en la vida, sin imaginarse que ese día encontraría su verdadera pasión.

Desde ese momento, Mylene de Forero empezó a acercarse a las comunidades y a las personas que luchan para ganarle la batalla a una enfermedad que ha apagado millones de sueños y ha destrozado familias enteras.

'En ese entonces me acerqué a la Liga en busca de información para saber qué podíamos hacer por mi papá y cuando la presidenta de ese momento me vio me preguntó si quería ser voluntaria y dije que podía empezar desde ya', recordó la actual presidenta de la Liga Contra el Cáncer Seccional Atlántico

Desde hace más de 40 años, la ‘niña Myle’ –como es conocida entre familiares, amigos y voluntarios de la Liga– trabaja incansablemente en la prevención y detección temprana del cáncer, dándole rienda suelta a su sueño de evitar que más familias vivan los momentos de angustia que los cobijó por la enfermedad de su progenitor.

'Me considero una mujer con una pasión tenaz por servir a todo aquel que lo necesite y eso es algo que aprendí de mis amados padres, quienes con el (Club) Rotario buscaban medicinas y comidas para donar', detalló.

Con voz tenue, Myle recordó a su padre como un hombre que contagió alegría y trabajó por la gente hasta el último de sus días.

'Mi padre se enteró que me había unido como voluntaria y sé que estuvo orgulloso de mí. En ese momento me dijo que sabía que de mis hermanos yo era la que más entendía cuál era el estado de su salud, aunque nunca supo cuál era la enfermedad que padecía, porque así lo decidimos', rememoró.

Otro de los episodios que marcó a su familia fue la enfermedad que llevó a la muerte a su madre, que se aceleró debido al humo que inhalaba de forma pasiva cuando estaba junto a su compañero sentimental.

'Mi esposo Óscar y yo también fuimos fumadores, pero gracias a Dios entendimos y logramos salir de eso; nos dimos cuenta a tiempo de las implicaciones. Ninguno de mis dos hijos, Giovanni y Juan Pablo, fuma y eso es algo que me hace feliz, darle un buen ejemplo a ellos', manifestó.

Desde 2008, cuando fue designada como presidenta de la Liga Contra el Cáncer Seccional Atlántico, Mylene Forero viene adelantando diferentes programas y jornadas de prevención y educación para evitar que más personas padezcan cáncer. En esto es vital el aporte que realiza su equipo.

Los colegios, los municipios y zonas rurales son los puntos focales a los que han llegado para asegurarse de replicar el mensaje y 'vacunar' con información a todas las poblaciones.

'Un buen ejemplo es que con ayuda de la Gobernación del Atlántico llegamos a Usiacurí para vacunar a niñas contra el virus del papiloma humano y estaban las niñas con sus mamitas y lo que les decíamos era que fueran y le contaran a sus amiguitas para que vinieran y cuidaran su salud', resaltó la presidenta de la liga.

Hasta el final de sus días Mylene de Forero espera trabajar en la lucha contra el cáncer y ayudar a que las familias permanezcan unidas. 'Yo creo que me veo llegando a la Liga hasta siempre, me veo con el bastón ayudando a que todos estén sanos'.

Recalcó que 'en nuestras instalaciones hay lugar para todos. Todos son bienvenidos y atendemos con una sonrisa gigante. Pueden acceder a nuestros planes y servicios de salud'.

Para ‘Myle’, lo más importante es el apoyo que su familia le brinda para permanecer trabajando en la Liga contra el Cáncer.

'Me imagino a mi nieta Helena, hija de Juan Pablo, llegando a la Liga así como lo hicieron mis hijos y siendo voluntaria de esta bonita labor', dijo.