En la tarde de este miércoles, la Secretaría de Salud Distrital, en cabeza de la secretaria Stephanie Araujo Blanco, entregó un reporte sobre el alarmante caso registrado desde la tarde del pasado martes y que hasta ayer dejaba al menos nueve muertos y ocho personas afectadas bajo permanente vigilancia médica en centros asistenciales de la red pública hospitalaria.
Araujo Blanco manifestó que los pacientes ingresaron a varios centros de MiRed IPS, y hoy se encuentran en observación y algunos en condición crítica con seguimiento permanente.
“Los pacientes atendidos presentaron síntomas como dificultad respiratoria, mareos, dolor abdominal y alteración del estado de conciencia, entre otros; por lo cual se procedió a tomar muestras de laboratorio y se está a la espera de los resultados toxicológicos para confirmar qué tipo de sustancia psicoactiva o metílica fue la que ocasionó esta intoxicación”, precisó la funcionaria de Salud distrital.
Reiteró que las personas fallecidas que ingresaron a los centros de salud son: Nicolás Manuel Medrano Martínez, Helmot Enrique Escolar Sotomayor, José Felipe Crespo Ortiz y Emérito Alberto Miranda Ospino.
Los otros casos, reportados directamente por la Policía Metropolitana de Barranquilla, corresponden a 5 fallecidos hallados en distintos sectores de la ciudad con causas que deberán ser determinadas por Medicina Legal.
Ever Miranda Orozco, de 55 años, y Víctor Antonio Vargas Hernández, de 65 años, son 2 de las personas encontradas e identificadas por la Policía. Los 3 restantes no han sido identificados.
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Así mismo, a través del comunicado entregado por la Secretaría de Salud Distrital, se confirmó que las autoridades vienen haciendo seguimiento a la situación, y dentro de las acciones se tiene prevista una mesa de trabajo con participación de Alcaldía distrital, Personería, Fiscalía, Policía y Defensoría del Pueblo.
Riesgo del licor adulterado
El consumo de licor adulterado se ha convertido en una de las principales alertas de salud pública. La ingesta de este tipo de bebidas representa un grave riesgo debido a la presencia de sustancias altamente tóxicas, entre ellas el metanol, solventes industriales y alcoholes no aptos para el consumo humano.
Tras la situación presentada este martes en el barrio El Boliche de Barranquilla, en la que las autoridades reportaron el caso de expendio y consumo de licor fabricado en un lugar sin las mínimas condiciones de salubridad, el cual ha causado la muerte de 7 personas, EL HERALDO consultó a una experta en el tema para determinar las consecuencias de esta práctica.

La toxicóloga Julia González advirtió que el consumo de licor adulterado representa un grave problema de salud pública, especialmente en América Latina, donde se han registrado múltiples brotes de intoxicación masiva en los últimos años. El riesgo radica en que estas bebidas suelen contener metanol u otras sustancias no aptas para el consumo humano, como solventes industriales, alcoholes de fusel, etilenglicol, colorantes o contaminantes metálicos.
De acuerdo con la especialista, los efectos sobre la salud se presentan en distintas etapas. En un inicio, las personas pueden experimentar mareo, vómito, dolor de cabeza y una sensación de embriaguez atípica. Posteriormente, aparecen síntomas más graves como dolor abdominal, visión borrosa y acidosis metabólica. En fases avanzadas, el cuadro clínico puede derivar en ceguera irreversible, convulsiones, coma e incluso la muerte.
El metanol, principal componente tóxico en estos casos, se transforma en ácido fórmico dentro del organismo, lo que causa lesiones severas en el nervio óptico y en el sistema nervioso central. Por ello, González resaltó que el tratamiento debe ser inmediato e incluye la administración de etanol o fomepizol como antídotos, bicarbonato para controlar la acidosis, ácido fólico o folínico y, en casos críticos, hemodiálisis para depurar las toxinas.
Más allá del impacto médico, el consumo de licor adulterado genera un fuerte impacto social. Brotes de intoxicación masiva, secuelas permanentes y altas tasas de mortalidad han sido reportados en distintas comunidades. Frente a este panorama, la toxicóloga enfatizó que la prevención depende de reforzar los controles sanitarios y, sobre todo, de evitar la ingesta de bebidas de origen desconocido.
“Llegaron con espuma en la boca”
Unos inconscientes y otros haciendo gestos de extrema agonía. Así llegaron los afectados al Nuevo Hospital Barranquilla, por presunta intoxicación con bebidas alcohólicas adulteradas, que hasta ayer dejaba nueve fallecidos.
“Vea, eso llegaban con la espuma en la boca, clarito se veía”, expresó la persona que por temor prefirió no revelar su identidad: “uno no sabe qué pudo estar detrás de eso”.
En su relato, el testigo detalló que “venían haciendo cara de dolor muy fuerte, estaban doblados. Estaban todos ‘desmenguados’. Los trajeron en carretillas los compañeros”.
Y apuntó que algunos de los afectados señalaron al personal de asistencia médica que “estuvieron diciendo que un señor que les estaba vendiendo un trago en unas botellitas”.
De acuerdo al Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos, el alcohol de madera, también llamado alcohol metílico o metanol, se utiliza para fabricar anticongelantes, plaguicidas, líquido limpiaparabrisas, diluyente de pintura, ciertos tipos de combustible y otras sustancias. Por su parte, la enciclopedia Británica advierte que el alcohol de madera tiene un olor similar al del alcohol etílico, el cual es el intoxicante de las bebidas alcohólicas, “pero es un veneno peligroso; muchos casos de ceguera o muerte se han debido a la ingesta de mezclas que lo contienen”.