La empresa Air-e detectó esta semana nuevas irregularidades eléctricas en el norte de Barranquilla y otros sectores del departamento del Atlántico.
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En el caso de la capital del Atlántico, se encontró un condominio en el sector de La Castellana, ubicado al norte de la ciudad de Barranquilla que tenía una línea directa en bornera del equipo de medida, medidor perforado por la parte trasera, medidor con puente externo en bornera y un equipo de medida frenado con carga.
Mientras tanto, en un restaurante del sector de Villa Santos, en Barranquilla, se encontró un medidor con la cubierta principal manipulada.
En el centro de Barranquilla, en el sector del Paseo Bolívar, también se detectó un servicio conectado de manera directa (sin medidor), y un medidor quemado en bornera, que suministraban energía a un establecimiento comercial dedicado a la fabricación y comercialización de textiles.
Por otro lado, se adelantaron otros operativos en el Conjunto Residencial Caoba en Soledad, ubicado cerca de Granabastos, donde se detectaron ocho casos de hurto de energía con medidores con puentes externos en la bornera, medidor con línea directa y medidores eléctricos con tapa principal manipulada.
Además, un casino ubicado en el barrio Centro de Sabanalarga, contaba con un equipo de medida electromecánico frenado con carga, siendo esta una de las prácticas más recurrentes para hurtar energía.
Casos reportados en Magdalena
En lo que respecta al Magdalena, la empresa Air-e Intervenida reportó tres casos en el municipio de Plato. El primero de ellos está relacionado con el hallazgo de un medidor electrónico con tapa principal y sellos manipulados, y un medidor con bornera quemada en una IPS del barrio El Progreso.
En simultáneo a este reporte, mientras que un colegio del sector de La Concepción contaba con un medidor electrónico con líneas directas por fuera de la medida, en un hotel del barrio Los Guayacanes se encontró un medidor electrónico con dos líneas directas por fuera de la medida.
La compañía reiteró el llamado a los usuarios para hacer un uso responsable y legal del servicio de la energía eléctrica, recordando que las personas que se apropian de manera ilegal del suministro se exponen a seis (6) años de prisión y multas de hasta 150 salarios mínimos legales mensuales vigentes por incurrir en el delito de defraudación de fluidos.
