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A dos millas de la costa de Coveñas, en plena zona turística del departamento de Sucre, permanece sumergido desde hace casi dos años algo que puede ser considerado un atractivo turístico y un impulsador ambiental.

Y efectivamente lo es porque la misión para la que fue encomendado con tan solo estar inmóvil bajo el agua la ha cumplido a cabalidad.

Estamos hablando del barco Oilmob, el mismo que otrora desempeñaba actividades en el terminal marítimo de la Empresa Colombiana de Petróleos, Ecopetrol, en este puerto del Caribe.

Y ahora, luego de que la embarcación cumpliera su vida útil, sigue prestando servicio, aunque de manera diferente.

En julio de 2019 la embarcación fue hundida para convertirlo en generador de vida coralina para ayudar a preservar el ecosistema, pero además se convirtió en un punto importante para los amantes del buceo.

Los artífices de la idea del hundimiento fueron el Centro de Buceo Diving y la Dirección General Marítima (Dimar).

Ha pasado un año y medio y los resultados saltan a la vista, o mejor, salen a flote.

El Oilmob tiene aproximadamente 15 o 20 metros de eslora y 4 o 5 metros de manga.

'El barco hundido ha sido una experiencia magnífica. Nos ha ayudado a fortalecer nuestra política institucional que es la de impactar positivamente en la región del Golfo de Morrosquillo. Primero porque es un atractivo turístico, y segundo porque el ambiente marino se beneficia también'.

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Así lo asegura el ciudadano español Guillermo Cámara, gerente e instructor del Centro de Buceo Diving, un consumado ambientalista que se enamoró de los atractivos del Golfo de Morrosquillo y del departamento de Sucre. Amor a primera vista.

Junto a su esposa, Ana Caicedo Rodríguez, a la par de una vida unidos, desarrollan ideas que luego convierten en hechos en beneficio de este territorio de enorme atractivo para el visitante.

Explican que la Dirección General Marítima –Dimar– los ayudó en la parte logística y legal para el hundimiento del barco.

'Desde que comenzamos a explorarlo hemos visto su progreso en cuanto al crecimiento de la vida coralina en cuestión de meses. Ha sido un proyecto muy positivo', explicó Cámara.

Los más felices también son los clientes y turistas porque cuando tienen contacto con la embarcación sumergida se sienten como 'en otro planeta' por tratarse de experiencias nuevas, como ellos mismos lo aseguran.

Quienes se sumergen en esa zona del mar Caribe tienen la posibilidad de observar peces y toda especie de flora y fauna que ya tienen a la embarcación como su lugar para vivir.

Un sitio estático que ha sido una especie de actor mudo de lo que se puede lograr en favor del medio ambiente.

El Centro de Buceo Diving funciona en Coveñas desde el primero de noviembre de 2017. Entre sus actividades están los buceos en las Islas de San Bernardo, Isla Fuerte, las costas de Coveñas y Cispatá. Igualmente ofrecen cursos con certificación de la empresa internacional Padi.

Cámara y su esposa también han liderado campañas de limpieza submarina en el Golfo de Morrosquillo, lo cual contribuye a que el amor por el entorno y el buceo recreativo se vea impulsado cada día más.

Se estima que en la zona del Golfo de Morrosquillo hay sembrados en promedio 55 arrecifes artificiales entre Tolú y Coveñas (Sucre) y San Antero (Córdoba).

Además de las actividades de buceo, una de las iniciativas más importantes es el crecimiento de la biodiversidad en el área.

Es así como las autoridades marítimas y ambientales dan cuenta de que en los arrecifes sembrados hay peces que muy poco se logran capturar en la zona porque están en peligro de extinción, como el pargo y el mero.

Algunas de las iniciativas de sembrar arrecifes artificiales han sido mediante alianza de Ecopetrol, Ocensa, Cenit, Carsucre, Corpo Golfo, con el apoyo de las alcaldías de los municipios del Golfo de Morrosquillo así como del gremio de pescadores de la región. Hasta hace dos años en la zona habitaban unas 380 especies entre peces, crustáceos y moluscos, de ahí la importancia de seguir extendiendo la siembra de arrecifes artificiales, que de acuerdo con la autoridad marítima son ubicados en áreas estratégicas entre 8 y 15 metros de profundidad.