El momento de sacar las sillas y ver cine ha llegado. Este martes el Festival Internacional de Cortometrajes de Cine a la Calle inauguró su edición número 24 en la Plaza de la Paz.
Hacia las 6:30 de la tarde la luna se fue acomodando para no perderse la primera función de cortometrajes que el público iba a disfrutar. Siendo el del barranquillero Leinad Pájaro De la Hoz,'Un pájaro voló', el primero en ser proyectado.
No obstante, antes del inicio, Jorge Ferreira, Gerente de la Fundación Cine a la Calle, expresó que desde hace 24 años el Ficica exhibe en la capital del Atlántico películas de corta duración de todo el mundo, convirtiendo a esta ciudad en una gran sala de cine y un excelente espacio para la reflexión académica durante cinco días y todo esto completamente gratuito.

“Sin duda alguna esta inauguración nos muestra que el Ficica será imperdible y que ilumina a Barranquilla con todas sus pantallas. Así que vamos a agendarnos desde hoy hasta el 17 de agosto, día en que nos volveremos a ver en la Concha Acústica del Sagrado Corazón después de haber recorrido la ciudad para dar la fiesta de clausura de este evento”.
Por su parte, Juan Carlos Ospino, secretario de Cultura del Distrito, explicó que Cine a la Calle “tiene un valor agregado y es el afecto que ustedes tienen para con este programa. Aspiramos que sea de su goce, de su disfrute y que en todos los rincones de la ciudad se acoja con mucho cariño, esta es una forma de contribuir al sano esparcimiento, al fortalecimiento cultural y a la integración familiar. Sean todos bienvenidos y gracias por acompañarnos en esta noche”.

Finalmente, Leinad Pájaro De la Hoz, quien estuvo presente en la inauguración dió unas palabras antes de proyectar su cortometraje que estuvo también en el Festival de Cine de Berlín o el Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias.
“Ficica es cuna del cine barranquillero desde hace ya 24 años y hay que apoyar la cultura barranquillera cinematográfica. Para nosotros es muy importante estrenar por primera vez el corto acá, en Barranquilla, la casa. Y bueno, este corto es muy especial porque es un homenaje póstumo a la vida de mi padre, Daniel Pájaro Sánchez, que fue un voleibolista que murió cuando yo era un niño”.






















