En el fantástico mundo de la creatividad, los niños con talento en literatura, música y teatro brillan con una luz especial, que ilumina los corazones de quien los observa con sus habilidades excepcionales y su pasión por el arte.
{"titulo":"Niños rinden emotivo concierto a Iván Villazón durante el Festival Vallenato","enlace":"https://www.elheraldo.co/cesar/ninos-rindieron-emotivo-concierto-ivan-villazon-en-el-marco-del-festival-vallenato-1089489"}
Los pequeños escritores Samuel Rueda y Sebastián Barros sorprenden con sus historias ingeniosas y sus proyectos increíbles que motivan a otros niños a interesarse en aprender sobre la literatura de escritores reconocidos como Gabriel García Márquez y Miguel de Cervantes Saavedra, con amor y entusiasmo. Samuel es el director de la Fundación Semillero Líder, en la que trabaja con sus padres y un grupo de maestros que enseñan danza, pintura, matemática, entre otras materias. Sebastián ha logrado publicar tres libros con el apoyo de su padre, quien igualmente es escritor.
Por su parte, las hermanas Naidelin Durango, Melany Martínez y Treixy Martínez, con cada puesta en escena e interpretación de canciones, crean un ambiente mágico que transmite ternura y el orgullo de las enseñanzas artísticas de su padre. Xander Martínez, el padre de estas tres niñas, ha sido parte fundamental en el aprendizaje artístico de las niñas, ellas actúan con títeres y al inicio de sus muestras folklóricas con canto.
{"titulo":"Realizan actividades por el Mes de la Niñez en varios sectores de Soledad","enlace":"https://www.elheraldo.co/atlantico/alcaldia-de-soledad-realiza-actividades-para-ninos-y-ninas-de-diferentes-sectores-del"}
La pequeña ilustradora Sophia Klee posee un gran talento como dibujante, y gracias a tal habilidad logró publicar El cuento del conejito Fufu, dedicado a la memoria de su abuelo, con el apoyo de sus padres, Paul Klee y Caro Gómez.
Escuchar hablar a cada uno de ellos es deleitarse con su carisma y léxico impactante, expresando una personalidad arrolladora que hace vibrar de emoción al mundo que está a su alrededor. Los niños son como diminutas semillas que abarcan un potencial infinito de crecimiento y aprendizaje. Es de vital importancia que los padres cultiven y nutran sus habilidades en el arte y el intelecto, ya que son la clave para su desarrollo integral y su bienestar emocional.
{"titulo":"Niños de la zona indígena de Córdoba cerraron en grande su mes","enlace":"https://www.elheraldo.co/cordoba/en-cordoba-ninos-de-la-zona-indigena-cerraron-su-mes-con-una-celebracion-en-grande-1089869"}
Además, los infantes se preparan para ser ciudadanos activos y creativos que contribuyan positivamente a la sociedad en el futuro. Con el ánimo de conmemorar el Día del Niño, EL HERALDO habló con estos pequeños grandes inspiradores, quienes contaron sus historias y expresaron la manera de hacer que su infancia sea divertida, pero a la vez productiva y llena de enseñanzas.
Naidelin, Melany y Treixy, las hermanas titiriteras, cantantes y bailarinas del colegio Marco Fidel
Motivadas desde muy pequeñas a pertenecer al mundo del arte, estas tres hermanas se enorgullecen de cantar, bailar y actuar para el público. Su padre, Xander Martínez, les enseñó a perfeccionar sus talentos con clases de música y teatro. Naidelin, la mayor de ellas, contó cómo aprendió a actuar con títeres. 'A la edad de 5 años empecé a cantar y a presentarme con mi papá en distintos lugares, luego empecé a actuar con los títeres, y cuando nacieron mis hermanas yo comencé a ayudarlas a aprender este arte', dijo.
Las dos más pequeñas se inclinan más por la música y el baile. En el escenario saben cómo desenvolverse y transmitir su energía musical. Las canciones folklóricas son su fuerte, Melany comienza a cantar la primera estrofa de Colombia, tierra querida y su pequeña hermana, Treixy, le sigue en el coro. 'Quiero que todos los niños sean felices, cantando, bailando o haciendo lo que más les guste', afirmó Melany.
Samuel Rueda y su Fundación Semillero Líder en la que promueve la lectura
'Mi abuelo me decía que un niño que lee es un niño que piensa'. Es así como Samuel, el niño líder, comenzó a interesarse en la lectura. Sus ganas de seguir capacitándose han hecho que a la edad de tan solo 11 años, corroborado por su madre, que lea unos 2 libros por semana de economía, liderazgo, matemáticas, entre otros. 'El primer libro que me recomendó mi abuelo es 'Cómo ganar amigos e influenciar sobre las personas', pero como era muy pequeño, solo tenía seis años, mi mamá me dijo que esperara, y el año pasado me lo leí', contó Samuel.
Ansioso por ayudar a otros niños, decidió hablar con sus padres para crear una fundación en el año 2019, con el fin de donar juguetes y llevar un mensaje de transformación a los pequeños de las comunidades más vulnerables del país. Natalia Durán, mamá de Samuel, se siente agradecida con su suegro por haber inspirado a su hijo a ser un líder para los niños.
Sebastián Barros, el chico que publicó el cuento ‘Anacleto y Babosín’ a los 6 años
Desde la lectura de su madre de los cuentos de Rafael Pombo, Sebastián se inspiró para crear su primer cuento a los seis años, que tuvo un excelente recibimiento en la comunidad infantil de Barranquilla, pues logró vender 1.400 unidades. Asimismo, logró presentar la obra en la FilBo 2016.
'Yo quería que mi cuento fuera muy visual, ya que era más niño en ese entonces, y una prima fue quien nos ayudó a realizar todas las ilustraciones. Siempre he sido muy gráfico', afirmó.
En el 2017, publicó El pájaro que olvidó los sabores, que fue inspirado en una experiencia que él tuvo con los sabores de algunos alimentos.
Sophia Klee y ‘El cuento del conejito Fufu’
Con un gran amor hacia los animales, Sophia pensó en crear un cuento en el 2020 divertido con un conejo al que llamó ‘Fufu’.
'Envié algunas copias de mi libro al colegio donde estudio y me sentí muy feliz porque otros niños me dijeron que los inspiré a hacer sus propios cuentos', afirmó Sophia.
Su abuela Esperanza Gallón, al darse cuenta de que la pequeña tenía un gran talento, tomó la decisión de apoyarla.
'Cuando ella me mostró lo que había hecho, me emocioné mucho y comencé a buscar quien le hiciera el libro. No es fácil, ni mucho menos económico, pero luché para cumplir su sueño'.




















