En la búsqueda desesperada de descubrir el amor y usar este sentimiento como la excusa perfecta para vivir nuevas experiencias, Nicolás y Felicidad de la Asunción, una joven pareja unida por la casualidad, deciden volverse cómplices del destino para ir a conocer el mar.
{"titulo":"La vez que Andrés Cuervo habló sobre su bipolaridad y la música","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/andres-cuervo-cantante-colombiano-que-murio-en-paris-hablo-sobre-su-trastorno-bipolar-y-la"}
Aunque sin saberlo su viaje estaría lleno de consecuencias inimaginables. La ruta comenzó desde Santiago de Cali, la capital del Valle del Cauca, y terminaría en Buenaventura, un destino que conecta el desarrollo del puerto con el mar, encontrándose así con el turismo.
En medio del largo camino, y bajo los efectos de la idílica emoción de sentirse en compañía, Nicolás dirige una conversación con Felicidad en la que este de forma pictórica decide narrar los hechos relacionados con la declaratoria de los derechos humanos.
Y es que con el paso del tiempo, los acontecimientos comentados por el protagonista revelaban de forma exacta la realidad sociopolítica de Colombia, y explica cómo esta permitió que los actos de violencias se asentaran durante décadas en el país.
{"titulo":"Juan Gossaín fue trasladado a otra clínica y se encuentra estable ","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/trasladan-juan-gossain-otra-clinica-para-continuar-su-recuperacion-946255"}
El final de las cosas perdidas es una novela basada en hechos reales, y que recopila los actos más crudos de la guerra, los cuales, a través de su publicación, buscan visibilizar diferentes problemáticas que han sido transversales en la historia de la paz.
Sin dar conclusiones específicas, una de las principales conclusiones a las que llega el título literario es a la reflexión sobre la necesidad de resolver los asuntos que han quedado suspendidos en una espera interminable, como la reparación a las víctimas.
A pesar de la complejidad de su temática, el relato es tan vivencial, cargado de descripciones de los paisajes colombianos y dinámicos, por el manejo de diálogos coloquiales, que la lectura de nuestra dificultad nacional resulta tan informativa como digerible.
Desde las letras de su autor
En entrevista con EL HERALDO, Mario Williams, autor del libro, comentó que la obra surge a partir de la necesidad de no olvidar nuestra historia y poder encarar hasta cierto punto la realidad del país.
'Aunque Colombia es un país recientemente constituido en comparación con otras naciones, no podemos negar que hemos tenido problemas gravísimos en materia de violencia, muchos de ellos enmarcados en el año 79, en el cual la severidad de las penas eran mínimas y esto permitió que este tipo de actos se asentaran por décadas en el país'.
Por otra parte, Williams dijo que el proceso creativo de su novela se enmarcaba en una conversación similar a la que tuvieron los protagonista sen su viaje a conocer el mar, e hizo mención de la intención final de su escrito.
'Este libro surge por la necesidad de contarles a las nuevas generaciones los acontecimientos de hace 40 años, además de la necesidad de tener espacios educativos que formen en materia de derechos humanos'.
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