A orillas del Río Magdalena, en el corazón de la Vía 40, entre calle 79 y la rotonda de la aleta del tiburón en Barranquilla, se encuentra uno de los sitios más emblemáticos de la ciudad, consolidado como el atractivo turístico más importante: el Gran Malecón del Río.
Su imponente vista a la principal arteria fluvial de Colombia empezó a seducir a propios y visitantes desde su inauguración el 17 de julio de 2017, conmemorándose este domingo cinco años de su nacimiento.
Su construcción dio paso a una nueva Barranquilla, aquella que no ha dejado atrás el Paseo Bolívar, la Plaza de la Aduana, la Catedral Metropolitana María Reina y la Plaza de la Paz, entre otros lugares que palpitan en el corazón de los barranquilleros.
Sin embargo, la materialización de esta obra permitió que Barranquilla dejara de ser la ciudad que le daba la espalda al río y se consolidara como la mejor transformación urbanística que ha tenido la capital atlanticense en la última década.
Es el destino que todo ciudadano desea conocer y disfrutar, aquel que encabeza la lista de planes por realizar. Es así como las últimas encuestas realizadas, arrojan que el 98 % de los visitantes se encuentran satisfechos con las instalaciones del espacio.
Un sitio turístico que hoy es el más visitado del país y que además de abrazarlos con el río Grande de la Magdalena, también compone un punto de encuentro entre los ciudadanos con el medioambiente.
Así lo manifestó el alcalde Jaime Pumarejo que vio cumplir tres años del lugar cuando llegó a su administración en el 2020.
'Es el espacio de encuentro y de equidad entre barranquilleros y el medioambiente, espacio que nos devolvió la mirada al río y que hoy se convierte en la punta de lanza de esa Barranquilla nuevamente frente al agua'.
Además, destacó la importancia de la recuperación de las fuentes de agua en la ciudad como un impulso de crecimiento en diversos sectores.
'Con la recuperación de la Ciénaga de Mallorquín, de nuestra playa en Puerto Mocho, de nuestros caños, en conjunto con todos los proyectos de mejoramiento de esa cuenca con agente biológicos, se convierten en una gran oportunidad para que Barranquilla se reencuentre con el agua, preserve su medio ambiente y al mismo tiempo lo utilice como un motor de turismo, desarrollo y empleo'.
En el Malecón hay espacio para que la gastronomía, el deporte, las actividades recreativas y culturales se conjuguen en un trayecto de 5 kilometros, de 5.5 kilómetros que están proyectados.
Zona de BBQ, canchas deportivas, parques para niños, parque de agua, parque de mascotas, plaza de Marinos, plaza de Luces, zona pícnic, jardín nativo y teatrino, entre otros lugares, tienen a disposición sus visitantes para que gocen de un plan distinto en cada estación.
Origenes de la obra
Recorrer el tramo que hoy posee el Malecón era una actividad impensable para los barranquilleros que temían pisar aquel terreno fangoso que yacía anteriormente en esta zona. Un ‘pantanal’ en el que fueron gestados los primeros peldaños que hoy son el resultado de la majestuosa obra.
Contemplar el río solo podía ser posible en una visita a uno de los restaurantes del barrio Las Flores o una ida al viejo Puente Pumarejo.
Ese sueño que tenían los habitantes de apreciar la arteria fluvial lo empezó a gestar el ex alcalde de Barrranquilla, Alejandro Char Chaljub en su segundo mandato (2016-2019).
Para ello, antes de su diseño el exmandatario hizo presencia en el Malecón de Nueva York, Chicago, en EE. UU. y Guayaquil en Ecuador.
'Fuimos a mirarlo y quisimos que este fuera el mejor entre los mejores', dijo Char en diálogo con EL HERALDO.
Su realización no fue sencilla, pero tampoco significó una labor imposible gracias al apoyo conjunto que obtuvo.
'El Estado es dueño de un pedazo, entonces se logró que todas las empresas que llegaban hasta el Malecón nos entregaran el pedazo que era del Estado y eso permitió hacerlo todo ancho y parejo. Fue un trabajo bien complejo, hoy parece fácil, pero ya lo más difícil lo hicimos'.
Lograr su financiación también fue un aporte grupal en el que se tomó un 90 % de los impuestos de los barranquilleros y que terminó en una inversión que se aproxima a los 700 mil millones de pesos.
'De los 700 mil millones de pesos, 650 mil millones se obtuvieron debido a que el Concejo de Barranquilla le permitió a la ciudad buscar los recursos a través de la figura de las vigencias futuras y poder hacerlo, si no era así, no lo hacíamos tan bien'.
Para el exalcalde, con el Gran Malecón del Río se sembró la huella de identidad y el registro de nacimiento de la nueva Barranquilla.
'Siempre lo he llamado la mina de oro de Barranquilla. Este será el pasaporte del desarrollo los barranquilleros y depende de las futuras generaciones cuidarlo, protegerlo y mantenerlo'.
A través del proyecto, la Alcaldía de Barranquilla recibió el Premio a la Excelencia Inmobiliaria 2017 otorgado por la Federación Internacional de Profesiones Inmobiliarias (Fiabci). Además, expertos del Banco Mundial consideraron acertadas la visión y la estrategia de planeación.
Un motor turístico imparable
Un sinónimo de progreso turístico. Así se ha constituido la construcción que diariamente atrae a turistas de todas partes del mundo. Desde su apertura en 2017 ha recibido más de 21 millones de visitantes.
Además, es el atractivo turístico más importante del país, siendo el lugar más visitado por cuarto año consecutivo, lo que se vio reflejado en el premio otorgado por TripAdvisor de ‘Traveler’s Choice 2022’.
La turista Rocío Coma disfruta pasear por ‘Curramba’ y deleitarse de los paisajes que hoy la embellecen, en especial, ama contemplar la tranquilidad que le produce observar el río Magdalena.
Desde Magangué, Bolívar, se instaló con su familia en la ciudad y goza del esparcimiento que le ofrece el sitio turístico.
'A mí me parece una experiencia muy linda, muy buena porque hay seguridad y se siente uno que puede caminar tranquilo. Los niños pueden patinar, y la atención del personal de los quioscos es muy buena, hay buenos servicios aquí en el Malecón y eso motiva a volver'.
Capturar las mejores fotografías a través de su cámara es una de las actividades que más disfruta hacer el barranquillero Humberto Pinto cuando llega al Malecón.
'Muchas veces vengo a hacer sesiones fotográficas por lo bonito que está, por los espacios que hay, la brisa, lo bien diseñado que está. Es toda una belleza'.
El impacto de sus diseños ha sido aplaudido por diversos expertos. Es así como recientemente su arquitectura ha sido premiada, siendo ganador de premios como la Bienal Colombiana de Arquitectura y Urbanismo, y Eurasian Prize International Architecture and Design Awards.
Con sonrisas en sus rostros, los foráneos reflejan lo confortable que es para ellos asistir al emblemático sitio. Gustavo Arbeláez es uno de ellos. El hombre llegó procedente de Cartago, Valle del Cauca, en compañía de unos amigos que pisaron por primera vez el lugar más visitado del país. 'Es maravilloso, el cambio de Barranquilla ha sido bastante significativo. Se ve una Barranquilla Pujante, hace años no venia y está totalmente cambiada'.
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Estímulo económico
Sus beneficios han respondido a su objetivo de ser una obra multipropósito. La economía ha crecido a gran escala, permitiendo que desde su apertura el promedio de ventas de estos comercios logre los $4.000.000, impactando a 330 empleados directos y a su vez, generando 750 empleos indirectos.
Leidys Aponte ha sido una de las comerciantes que se ha favorecido con la iniciativa y destacó su importancia en Barranquilla.
'Así nosotros tenemos una nueva oportunidad de trabajo y vivimos de una experiencia única con tener al río cerca y el hecho de que vengan personas de afuera, le da un toque multicultural en el que he aprendido mucho'.
Su restaurante se encuentra en el Caimán del Río, una de las zonas gastronómicas más importantes de la ciudad y en el que convergen una mixtura de sabores.
Para el secretario de Desarrollo Económico del Distrito, Ricardo Plata, el lugar ha sido el impulsor de una dinámica diferente.
'Tiene un valor agregado enfocado en una oferta de naturaleza, con sus paseos por el río y el avistamiento de aves, gastronomía, con una gran variedad de locales y espacios. Un ejemplo de progreso y reactivación económica'.
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Espacio cultural
Su dinamismo permite que todos los sectores converjan en un solo lugar. Es así como la cultura también tiene su espacio, realizándose más de mil eventos en el sitio. Para la secretaria de Cultura del Distrito, María Teresa Fernández, se ha consolidado como el escenario de grandes citas. 'Es el gran escenario para los barranquilleros, especialmente para encontrarnos con el arte y la cultura, ha enriquecido todo'.
