Compartir:

Una siesta es un breve período de descanso y sueño durante el día, generalmente en la tarde. Consiste en tomar una pausa corta para relajarse y dormir por un período limitado. Se ha convertido en una práctica cultural común en muchas partes del mundo y puede tener beneficios para la salud y el bienestar.

{"titulo":"'Son una trampa mortal': OMS advierte sobre los cigarrillos electrónicos","enlace":"https://www.elheraldo.co/salud/son-una-trampa-mortal-oms-lanza-advertencia-sobre-los-cigarrillos-electronicos-1021405"}

Un reciente estudio publicado en la revista British Journal of Sports Medicine reveló cuál es el tiempo ideal de este descanso. Tres revisiones sistemáticas recientes y dos revisiones narrativas informaron efectos positivos de la siesta en el rendimiento deportivo, como mejorar el rendimiento físico (p. ej., salto, fuerza, carrera de sprint repetido) y cognitivo (p. ej., atención y tiempo de reacción).

Revisiones sistemáticas recientes han respaldado los efectos favorables de las siestas diurnas en el rendimiento deportivo y las calificaciones subjetivas de fatiga tanto en condiciones de sueño normal como de privación parcial del sueño, pero aún no se ha realizado un metanálisis para estimar la magnitud de estos beneficios.

{"titulo":"¿Quiere mejorar su salud? Estos alimentos debe eliminar según Harvard","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/quiere-mejorar-su-salud-estos-son-los-alimentos-que-debe-eliminar-segun-harvard-1021217"}

Y es que un breve descanso durante el día puede mejorar la concentración, la atención y el rendimiento mental en actividades posteriores.

De acuerdo con el estudio, después del almuerzo (aproximadamente a las 14:00 horas) la siesta de 30 a 60 min tiene un alto efecto beneficioso suplementario sobre el rendimiento físico y promueve una mejora moderada en el rendimiento cognitivo y una reducción de la fatiga percibida tras la actividad deportiva.

Se requiere un tiempo mínimo de 60 min desde el despertar de la siesta para evitar que los beneficios de la siesta sobre el rendimiento deportivo se vean atenuados por la inercia del sueño.

Fueron estudiados 291 participantes masculinos (164 atletas entrenados y 127 adultos físicamente activos) con edades entre 18 y 35 años.

Se estableció que cuando se realiza después de una noche normal de sueño, la siesta de 12:30 horas a 16:50 horas (siendo las 14:00 horas el horario más frecuente) mejora la función cognitiva.

Los efectos positivos de la siesta también se confirmaron después de la privación parcial del sueño.

'Aunque la evidencia de los estudios realizados bajo la privación parcial del sueño sugiere beneficios similares a los observados después del sueño normal, aún no se puede establecer una recomendación sólida sobre si la siesta diurna compensa la pérdida en el rendimiento deportivo que resulta de la privación parcial del sueño', se lee en la publicación.