
Con las manos atadas fue hallado ayer otro cuerpo sin cabeza flotando en el río Sinú en el corregimiento Jaraquiel, zona rural de Montería.
Según las autoridades sería el cuerpo de la cabeza que permanece desde hace 12 días en Medicina Legal y que fue hallada junto a otra en la vía que conduce al corregimiento Guateque, cerca al barrio El Privilegio.
Las autoridades competentes señalaron que no se puede decir que el tronco encontrado corresponda a esa cabeza. Indicaron que necesario hacer las pruebas de ADN en ambos casos. El cadáver tenía las manos amarradas atrás, estaba en avanzado estado de descomposición, vestía un jean, una camiseta de color oscuro y no tenía zapatos.
Se trata de un cuerpo que podría ser el de una personas de unos 1.80 metros de estatura, de contextura gruesa y piel blanca.
ESTABA ATADO. Contrario a los otros dos cuerpos que fueron hallados hace unos días, este estaba atado lo que podría indicar que la persona fue torturada antes de su asesinato.
Desde el pasado viernes 14 de septiembre cuando se conoció el caso de las dos cabezas halladas en la vía a Guateque, inició el rosario de misterios y especulaciones en la ciudad.
Dos días después (domingo) al mediodía se halló uno de los cuerpos flotando en el río el cual fue rescatado en Jaraquiel, pero horas antes un cadáver completo también fue hallado en la vereda Medellín Sapo.
El primero correspondía a Daniel Ramos y el segundo a Elkin Herrera Arroyave, ambos jóvenes y residentes en el barrio Las Granja, sur de Montería.
Del rosario de misterios hace parte la extraña desaparición de Sebastián Zumaqué, de 18 años, quien habría salido con las otras personas el viernes y de quien sus familiares y autoridades no han vuelto a saber más nada.
La incertidumbre sigue puesto que para las autoridades todo parece indicar que la otra víctima es Sebastián Zumaqué Pineda, pero la familia dice que el cadáver no es el del joven y están a las espera de las pruebas de ADN.