El llamado Punto G que se ubica en la margen izquierda del río Cauca, a su paso por las poblaciones de Majagual (Sucre) y Achí (Bolívar) ha sido golpeado con mucha fuerza por el intenso verano, tanto que ha debilitado el jarillón, por lo que en el invierno puede ser una puerta para que las aguas inunden a la Mojana.
La alerta sobre este punto crítico la lanzó ayer el alcalde de Majagual, Ramiro Rada, quien dejó en claro que pese a esta situación aún no se realizan allí las obras que se necesitan.
'Decretamos la calamidad pública porque tenemos muchos inconvenientes con el Punto G dado que en época de invierno las aguas del río Cauca pueden entrar a todos los municipios de la Mojana porque ya se ha erosionado la banca que va de Majagual a Achí', dijo el mandatario.
Agregó que las pérdidas por el verano son cuantiosas y se evidencian en reses muertas, aunque no entregó cifras, como tampoco de la de cultivos, porque están en proceso de verificación por la Umata.
Indica que las pérdidas por el invierno serán el doble de las que hay en esta temporada seca, 'pues cada inundación nos deja en cero, para volver a empezar'.
El Punto G es uno de los sitios que hace un año la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo priorizó por ser vulnerable en temporada de lluvias, pero las obras allí realizadas son temporales o provisionales.
Una de las acciones del Gobierno de Sucre en su plan operativo por la sequía fue la entrega de maquinaria, pero el alcalde de Majagual dice que la de su municipio no ha llegado aún y por eso no han realizado ningún tipo de obras de mitigación, pero desde ya anunció que la primera intervención será al Punto G.
Los alcaldes de Guaranda y Sucre-Sucre, las otras poblaciones de la Mojana, también manifestaron que la sequía los tiene muy afectados, en especial en lo que al transporte se refiere debido a que los niveles del río no les permite la navegabilidad y las vías están en mal estado, además de encarecer los costos del transporte.