El pasado lunes 24 de noviembre se completaron ocho años del caso que estremeció a los habitantes de Soledad y el resto del departamento del Atlántico por la dolorosa desaparición y muerte de la estudiante del Sena Gabriela Andrea Romero Cabarcas.
Aquel hecho, que destapó no solo una serie de atrocidades dentro de la llamada violencia de género sino las conductas o patrones que eran reiterados en el hombre acusado de su desaparición forzada y su muerte, todavía se mantiene en la memoria colectiva de los habitantes de este territorio.
Un par de días después de la conmemoración de la desaparición de la joven que apenas alcanzaba su mayoría de edad, EL HERALDO dialogó con Luz Divina Cabarcas y con Harold Romero, sus padres, quienes, en un acto simbólico, como muchos de los han realizado en su memoria, hicieron uso de la Inteligencia Artificial (IA) para recrear unas imágenes al lado de Gabriela con su vestido de grado, ese que había obtenido de la institución educativa Francisco José de Caldas.
“Sí, fue muy fuerte crear esas imágenes, sobre todo, en la que ella se abraza con su hermano Gianfranco”, expresó Luz Divina Cabarcas.

Hay que señalar que cuando se reportó la desaparición de la joven ese 24 de noviembre de 2017 y se encontró su cuerpo sin vida en una zona apartada de Malambo el 15 de diciembre, cercana al viejo matadero de reses de la población, su hermano menor era todavía un niño. Hoy es un adulto y aún recuerda los momentos vividos a su lado.
Y, según la experiencia de la madre de la estudiante, “fue tan fuerte” ver ese abrazo entre ambos que “al colocarla en mi fondo de pantalla del celular me causó tanta impresión que me tocó quitarla”. “La sentí tan real, que me tocó hacerlo”, aseguró.
“En casa todavía la recordamos y no superamos que, si estuviera viva, estaría cumpliendo cada uno de sus sueños, sueños que nos quedaron incompletos. Incluso volver a tener la foto de los cuatro juntos”, expuso la madre.
Por su parte, Harold Romero indicó que las imágenes creadas por la tecnología son tan reales que “las veo y es como se vería ella en estos momentos, con sus 28 años”.
Proceso judicial
EL HERALDO conoció que el proceso judicial por la muerte de la joven estudiante del Sena continúa en etapa de juicio en el Juzgado Único Especializado del Circuito de Barranquilla y se mantiene como acusado el expolicía, ya condenado por otro proceso, Levith Aldemar Rúa Rodríguez, apodado la ‘Bestia del Matadero’.

En el marco del juicio oral, la Fiscalía continúa esta semana con la práctica probatoria, un proceso que avanza de manera pausada debido a la extensión y complejidad del caso. Con más de cien testigos incluidos en su lista, la agencia fiscal encargada ha venido presentándolos uno a uno en cada sesión de audiencia, lo que ha generado un desarrollo minucioso y detallado del expediente. Actualmente, el interrogatorio se centra en uno de los testigos clave de la acusación.
Cabe reseñar que esta historia se desprende de un contacto entre Rúa Rodríguez y la joven Gabriela a través de Facebook el 15 de noviembre de 2017. Luego de conversar con ella por unos días, Rúa le ofreció trabajo como niñera en una casa finca, algo que sonó tentador para la joven, pues, según el relato de su madre, ella buscaba dinero para comprarse la ropa de diciembre.
El 24 de noviembre, Rúa la habría citado en un centro comercial de Soledad y desde ese día se desconocía de su paradero hasta el 15 de diciembre cuando descubrieron el cuerpo de la joven estudiante del Sena en una trocha llamada Tamarindo en Malambo, sobre el kilómetro 3, vía Caracolí.

Según las autoridades, el hombre habría abusado sexualmente de ella y luego le quitó la vida asfixiándola.
En medio de las investigaciones contra el individuo se determinó que este había participado de otros casos de abuso en el Caribe y en marzo de 2019 fue condenado por un juez de Soledad por la violación de una menor de edad, en hechos ocurridos para la misma fecha en la que desapareció la joven Gabriela Romero Cabarcas.




















