Lofoscopia, la labor pericial para cazar a los suplantadores

Junio. Mitad de año. Vacaciones. Un cúmulo de buenas noticias dentro de las que se encuentra el 'respiro' del bolsillo, gracias a la prima de mitad de año, una prestación social que 'saca de apuros' a muchos colombianos. No obstante, con el olor a dinero en las calles, los criminales carroñeros no dudan en salir a atracar con armas en manos y cometer fleteos para usurpar lo trabajado a los atlanticenses.

Además, durante todo el año, pero sobre todo para esta fecha, existen otros tipos de delitos, los cuales pueden ser llamados silenciosos, y que no requieren el uso de la violencia para dejarte 'sin un peso'.

Algunos de estos son las ventas en línea con pagos mediante cheques sin fondos; la suplantación de la identidad a través de llamadas telefónicas, fingiendo ser una entidad financiera para obtener y robar información y así tramitar todo tipo de créditos de manera directa o a través de fintech (financieras virtuales) para obtener créditos que después son desembolsados en cuentas de ahorros que han sido diligenciadas con datos falsos.

Años atrás, a la casa de Josué* en Barranquilla llegaron uniformados adscritos a la Policía de Pereira para capturarlo, pues, al parecer, un vehículo que aparecía registrado a su nombre participó en un crimen. La sorpresa del hombre fue tal que el habla le desapareció por varios minutos.

'Aparte de la impresión que me dio que personal de la Policía llegara a mi casa a capturarme, mi mente no articulaba el de dónde tenía yo una camioneta, y mucho más por esos lados', contó a EL HERALDO.

Lo que no recordaba el hombre es que meses antes de ese suceso fue víctima de robo y allí sus documentos les fueron arrebatados: 'A mí me atracaron saliendo del trabajo y pues se llevaron todos mis papeles. Al parecer lo que hicieron fue falsificar mi firma y mi huella junto a los documentos y sacar cinco camionetas de alta gama, una en Barranquilla, otra en Galapa, otra en Montería y otras dos en Medellín'.

Todo eso salió a la luz en medio de la investigación adelantada por la Fiscalía, en la que descubrieron que el resto de automotores están vinculados legalmente a la víctima; empero, algo que pasó hace unos años todavía continúa mortificando su vida: 'Comparendos, proceso judicial, críticas en mi trabajo, todo eso ha permeado mi vida. Afortunadamente ya me realizaron el proceso de la toma de huellas y la firma, para así comparar con los papeles con los que sacaron los carros'.

Una de las formas para tratar de esclarecer el caso anterior y otros casos ligados a la suplantación es la de recurrir a la lofoscopia, uno de los métodos de identificación humana de mayor efectividad y que más es utilizado en el mundo. Esta es una de las ramas de las ciencias forenses que tiene como finalidad la identificación de las personas a través de sus dibujos dactilares o huellas dactilares, como se conocen popularmente.

'Las impresiones dactilares se forman desde el cuarto mes de gestación, es decir desde cuando el bebé está en el en el útero, pues estas huellas permanecen perennes en el cuerpo del hombre desde el momento antes de nacer hasta inclusive después de la muerte, es decir que no cambian con el paso del tiempo y además son diversiformes, que no hay dos huellas idénticas en el mundo', explicó a EL HERALDO Nixon Richard Poveda, especialista forense certificado.

De acuerdo con el experto, este proceso lo que permite es que a través de las huellas se pueda identificar a una persona por medio del sistema de búsqueda automatizada AFIS, mismo que maneja la Registraduría, la Fiscalía General de la Nación y muchas entidades gubernamentales.

Las impresiones dactilares son muy valiosas, especialmente en el sector comercial, financiero, bursátil, en la industria, y en cualquier tipo de transacciones, pues el hombre ha venido ideando maneras de falsificarlas en binomio con la firma, pues los dos elementos son los que permiten determinar la identidad de una persona.

'Inicialmente las huellas dactilares se quemaban a través de unas mantillas de caucho. En cualquier casa tipográfica se realizaba la impresión dactilar, se quemaba el molde basado en la cédula de ciudadanía de la persona a quien se le había perdido o se compraban documentos o muchas veces se penetran a las entidades financieras y se infiltran a funcionarios de los bancos para que estos entreguen información de las posibles o potenciales víctimas en este mercado negro de la información', precisó Poveda.

En ese sentido, desglosando el modus operandi de estos delincuentes descubrimos que primero este debe hacerse a una información básica para poder suplantar la identidad, es por ello que consultan entidades de riesgos, se crean contactos en las entidades financieras y se obtiene información de primera mano para saber qué personas tienen un perfil de crédito que sea 'valioso' para las bandas de delincuentes.

'Una vez se identificó a este tipo de persona, entonces proceden a hacerle un seguimiento para conseguir la cédula, para luego falsificarla modificando la firma, la huella y modificando la fotografía, y la persona que la va a suplantar se presenta en los bancos haciéndose pasar por la víctima para sacar créditos simultáneos y en diferentes bancos. Tarjetas de crédito, créditos de libre inversión, productos bancarios, entre otros, y una vez está haciendo el trámite, se utilizan también impresiones dactilares que han sido quemadas en látex o en cauchos, que son los que se estampan sobre el documento y que guardan las mismas características morfológicas de la huella dactilar legítima, pero con la diferencia de que no ha sido rodada de manera natural, sino que se trata de una impronta que ha sido puesta de manera mecánica', agregó el experto forense.

Conforme a lo explicado por el investigador, con el surgimiento de créditos en línea se ha facilitado el incremento del fraude, pues uno de los sectores más golpeados es el financiero, en donde las transacciones bancarias, a pesar de que son revisadas por especialista o expertos, siempre se filtran documentos falsos que cada vez son más sofisticados y más difíciles de detectar.

'Es importante señalar que la inteligencia artificial está jugando un papel importante porque a través de esta se pueden reproducir firmas, se pueden reproducir rostros, se puede reproducir la voz y se pueden emular las características de las víctimas para lograr la finalidad de que sea suplantado', dijo Poveda.

Es allí donde entran los especialistas forenses de documentos, quienes deben estar formados, primero como lofoscopista, y segundo en conocimientos de sistemas de impresión, para que pueda reconocer cuando la impresión dactilar proviene del rodamiento natural del dedo o cuando la impresión dactilar pueda ser estampada a través de un sello de caucho o de látex.

La lofoscopia no solo es utilizada para investigar casos en los que haya una suplantación de identidad, sino también es una herramienta útil para la recolección de impresiones dactilares que hayan sido dejadas en una escena que reviste las características de un delito, por ejemplo un robo, un acceso abusivo a algún lugar, la pérdida o sustracción de algún elemento. 'Estos objetos son manipulados por los delincuentes y allí quedan impresiones dactilares, que son llamadas latentes, es decir que están ahí, pero que no se pueden observar a simple vista, entonces el especialista forense utiliza diferentes técnicas para recoger y preservar esa impresión dactilar y presentársela al juez', manifestó el forense.

Estas muestras pueden ser recogidas de diferentes maneras: aplicación de reactivos, aplicación de luces forenses, aplicación de tabletas que son conocidas como 4K, a través de las cuales se proyecta una luz y con diferentes filtros se puede revelar la impresión dactilar que ha quedado en el lugar de los hechos. Esto se compara con la base de datos de los sospechosos o realizan una búsqueda en bases de datos de delincuentes y permite identificar plenamente a las personas.

Otro escenario en el que se utiliza este método es para la identificación humana en casos de muertes violentas: 'Cuando una persona ha fallecido de manera violenta, bien sea por violencia extrema o porque han dejado el cuerpo a la intemperie, pues las huellas permanecen en el cuerpo inclusive después de muertos por un tiempo, y eso permite que los expertos forenses utilicen esos pulpejos del cadáver, los impriman y los puedan identificar a través de la tarjeta decadactilar', expuso Poveda.

Algunas recomendaciones realizadas por el experto son las de ser muy cuidadoso con los documentos de identidad; evitar la reproducción mediante fotocopias o estar dejando documentos en fotocopia en todas partes; evitar estar imprimiendo huellas dactilares o poniendo la huella dactilar en cualquier lugar; cuidado con las transacciones electrónicas por Internet; Estar pendientes del teléfono, porque hay delincuentes que pueden bloquearlos para evitar que la persona sea llamada por la entidad financiera para ellos confirmar la transacción.