Por Paola Alcázar Hernández
Barranquilla siempre es la ciudad a donde él escoge volver. Y es que no solo aquí se empezó a educar para cura, sino que luego de varios años de vivir en la capital del país, La Arenosa, acostumbrada a recibir a los caribes universales, volvió a acogerlo para que empezara a desarrollarse como el sacerdote de los medios de comunicación.
No resulta extraño, entonces, que el calor húmedo que se apropia de la ciudad por estos días, lo motivara a hacer la acostumbrada llamada a la amiga de siempre, esta vez para decidir confesarse sobre la recién enviada renuncia a su rol de sacerdote.
Llegó con el afán del costeño que vive en Bogotá. Esta vez invitado por la editorial de su último libro, Dios es mujer, para autografiar algunos ejemplares en un centro comercial de la ciudad.
Pregunta: Padre Linero, ¿aún te podemos decir 'padre'?
Pregunta: Pero, durante este año sabático que ya casi termina, te seguían diciendo 'padre'.
Pregunta: Hay una frase bíblica que dice: 'Tu est sacerdos in aeturnum' (Eres sacerdote para siempre) ¿Aplica eso?
Pregunta: ¿Qué has hecho en este año que no podías hacer?
Pregunta: Cuando mencionaste 'vivir solo', es como si te rieras de ti mismo, ¿Cómo ha sido vivir solo?
Pregunta: Pero, ¿Lo disfrutas?
Pregunta: También me mencionaste que otra de las ganancias de este año sabático es que creaste tus propias relaciones, ¿A qué te refieres y de qué tipo de relaciones estamos hablando?
Pregunta: Resulta paradójico entonces, aunque antes no vivías solo sino en comunidad, ahora te sientes más acompañado.
Pregunta: A Alberto Linero, padre, se le veía viajando, dando prédicas, conferencias, firmando libros, ¿Eso sigue?
Pregunta: ¿Por qué?
Pregunta: Hablando de eso ¿Fue un comunicador que le sirvió al cura? o ¿Fue un cura que le sirvió el comunicador?
Pregunta: El Padre Linero siempre ha despertado mucha polémica y de hecho ahorita me decías que tú no eras un cura convencional o el típico cura, y que te has salido un poco del molde. ¿Si no hubieras sido cura, en lo que estuvieras te habrías salido del molde?
Pregunta: ¿Desde niño?
Pregunta: ¿En todos estos años de tantas confesiones que has hecho, los pecados cómo han ido cambiando?, ¿Siguen siendo los mismos de siempre?
Pregunta: ¿Los mismos?
Pregunta: ¿Qué consejo le darías a un joven que te diga que quiere ser cura?
Pregunta: ¿Te sentiste sanguijuela alguna vez?
Pregunta: Pero eso pasa en todas las instituciones.
Pregunta: Algunos de los títulos de tus últimos libros publicados son: ‘No mendigues amor’, ‘Sin libertad no hay amor’, ‘Mi Venganza es perdonarte’ ¿Estos textos Invitan a un amor en libertad?, ¿Cómo es ese amor?
Pregunta: ¿Entonces el amor está en la razón y no en el corazón?
Pregunta: ¿Crees que la Iglesia sintió un alivio cuando pediste el año sabático?
Pregunta: ¿Podemos decir que este año sabático fue también una preparación para los feligreses, para que te dejáramos de ver cómo un sacerdote?
Pregunta: ¿Si el celibato no existiera, qué te estuvieras planteando ahora?
Pregunta: ¿Cuál es tu problema?
Pregunta: Vas a cumplir 50 años pronto.
Pregunta: ¿Y cómo te sientes?, ¿Fracasado?, ¿Exitoso?
Pregunta: Al Padre Linero le hemos oído hablar mucho más de la vida que de la muerte, ¿Para Alberto Linero, el hombre, qué es la muerte?
Pregunta: Hablemos de otro de los miedos, anhelos y también de otra de las causas de la muerte del hombre: ¿Qué es el dinero para usted?
Pregunta: El público de Alberto Linero, el padre, es más femenino que masculino, ¿Qué ven las mujeres en Alberto Linero, el hombre?
Pregunta: Bueno, esa descripción parecería ser la del hombre ideal, el hombre que una mujer buscaría, ¿Cuál es la mujer ideal?
Pregunta: En entrevistas anteriores, has dicho que se puede estar enamorado de muchas personas al tiempo, ¿Cómo es eso?
Pregunta: Entonces en ese bar de putas con muchos salones, ¿Dónde se hospeda el amor?
Pregunta: Siempre has dicho que la religión y la política no se revuelven. Ahora que te apartas del mundo religioso, ¿Entrarás al terreno político?
Pregunta: Entonces, ¿Alcalde de Barranquilla o de Santa Marta?
Pregunta: ¿Crees que los barranquilleros te elegiríamos como alcalde?
Pregunta: O sea que sí estarías interesado, pero no hay ninguna propuesta ¿Si para las próximas elecciones se presentara esa posibilidad, aceptarías?
Pregunta: ¿Te vas a salir del sacerdocio? ¿Ya enviaste el mail a Roma?
Pregunta: ¿Y ya te respondieron?
Pregunta: ¿Qué decía ese mail?
Pregunta: ¿Cuándo va a llegar esa respuesta?
Pregunta: ¿Qué harás en el 2019?
Pregunta: ¿Te casarías por la iglesia?
Pregunta: Ya sabemos que te gusta el vallenato…





















