Ante el anuncio de un Fenómeno de El Niño en Colombia para final de 2023 y un posible escenario de tiempo seco hasta mayo de 2024, las lluvias han sorprendido y en un periodo inesperado en algunas regiones del país.
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El 22 de octubre, según información de XM, del Operador del Sistema Interconectado Nacional y administrador del despacho de energía mayorista en Colombia, los aportes del día por lluvia tenían un nivel del 43 % y un aporte de generación de las térmicas de 84 %, mientras que 13 días después, la cota alcanzó 122 % con un aporte de 32,2 %. Estos extremos no son considerados como normales en pleno proceso de formación del ‘Niño’ y es por lo cual, algunos embalses e hidroeléctricas han tenido que recurrir a los vertimientos.
Natalia Gutiérrez, presidenta de la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica, explicó que cuando se dice que las hidroeléctricas están botando agua se hace referencia a los vertimientos. 'Los cuales representan o son el agua que se deja pasar de las presas (embalses) cuando llueve más de lo esperado, y quiero señalar que esto es totalmente indeseable para los generadores. Pues es agua que no se usa para generar'.
Colombia, que tiene una matriz energética de más del 60 % a base de agua, conformada por 23 embalses, de los cuales 10 en Antioquia, uno en el Caribe, seis en el centro del país, tres en el oriente y tres en el Valle del Cauca, está sometido por su proximidad al Ecuador al estrés del Fenómeno de El Niño.
La ausencia de lluvias obligará a que la matriz, basada en generación de energía hídrica y una capacidad máxima de 13.506 megavatios (MW), tenga que complementarse con la entrada de las plantas térmicas (5.053 MW) que operan a base de combustibles y solar (455 MW) y eólica (18 MW).
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Con la situación compleja y financiera de las comercializadoras y distribuidoras, uno de los actores de la cadena que encabezan las generadoras y transmisores, los precios del kilovatio hora se han disparado hasta alcanzar el histórico de $1.452 kilovatio hora (kwh). Que haya techos de precio del kilovatio hora en la bolsa y se busque cuál eslabones de la cadena han impactado más, los generadores interpretan que, aunque se tenga abundancia de agua y esta no sea aprovechada, no encarecen su precio en el mercado de compradores.
'Los vertimientos no incrementaron el precio de la energía en la bolsa. En los momentos que se hicieron vertimientos en estos periodos el precio de bolsa bajó. Y esto además explica la composición de nuestra matriz eléctrica: cuando tenemos abundancia hídrica, se reduce el precio de bolsa. Pero también hay que entender que los vertimientos sí están respondiendo a no solo señales de lluvias, también pueden ocurrir vertimientos por obligaciones de las licencias ambientales para regular el caudal ambiental. Son vertimientos marginales', aseguró Natalia Gutiérrez.
En agosto de 2022, la represa del Urrá, la única en la costa Caribe, reportó que estaba cerca de cumplir con el máximo nivel del embalse y por el aumento de las lluvias.
El vacío normativo y que señala Alejandro Castañeda, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras de Energía (Andeg) se necesita para estos casos y cuando se debe aprovechar agua para generar en algunos embalses.





















