El Consejo Privado de Competitividad (CPC) y la Universidad del Rosario presentaron por duodécima vez consecutiva los resultados de su Índice Departamental de Competitividad (IDC) para los 32 departamentos del país y la ciudad de Bogotá. En esta oportunidad el departamento de Atlántico ocupa la sexta posición de la medición, con un puntaje de 6,15 sobre 10, ubicándose por delante de los departamentos de Caldas y Cundinamarca.
En ese sentido, se reveló que el departamento del Atlántico avanzó dos posiciones frente al recálculo de 2024. En particular, este territorio registra su mejor desempeño en el pilar de sofisticación y diversificación, en el que se ubica en la posición número 6 y registra una puntuación de 8,89. Este resultado se debe a que ocupa la quinta posición a nivel nacional en diversificación de la canasta exportadora.
Adicionalmente, el departamento se ubica en la tercera posición en el pilar de salud, con un puntaje de 7,48 sobre 10. Se destaca principalmente en el indicador de controles prenatales en el que ocupa la primera posición entre los 33 territorios evaluados.
Por otra parte, Atlántico concentra sus principales oportunidades de mejora en el pilar de sostenibilidad ambiental en el que registra una puntuación de 3,47, y ocupa el último puesto. Puntualmente, el departamento presenta retos importantes en las variables de eficiencia energética, eficiencia en el uso del agua, negocios verdes y empleos verdes.
Finalmente, el departamento incrementa su puntaje general en 0,1 puntos respecto al recálculo para 2024. A demás registra su mayor avance en el pilar de adopción TIC, en el que mejora en 0,8 puntos frente al año anterior. De otro lado, Atlántico presenta su mayor caída en el pilar de instituciones, en el que cae 0,7 puntos, por cuenta de su retroceso en los indicadores de índice de gobierno digital para el Estado, y autonomía fiscal.
En esta oportunidad, la medición se compone de 98 indicadores duros provenientes de fuentes oficiales del orden nacional. Asimismo, es importante señalar que el IDC incluye una serie de ajustes metodológicos en comparación a versiones anteriores.
El más importante de estos es la reestructuración del pilar de sostenibilidad ambiental, el cual incluye nuevas dimensiones de análisis, recogiendo en buena medida las observaciones y sugerencias de expertos en la materia y también de los usuarios de la publicación.