La Federación Internacional de Boxeo (AIBA) inicia una semana decisiva para su futuro, en la que el Comité Olímpico Internacional (COI) podría decidir retirarle la organización del torneo de los Juegos de Tokio-2020.
Problemas de gobernanza, sospechas de combates amañados en los Juegos de Río-2016, un programa antidopaje criticado, preocupaciones sobre su salud financiera... La Aiba acumula problemas en los últimos años.
La llegada a su presidencia en noviembre de 2018 del empresario uzbeko Gafur Rakhimov, que luego tuvo que dimitir, fue la gota que colmó la paciencia.
Una Comisión de Investigación, que ha recibido ya las respuestas de la AIBA a más de cincuenta preguntas, someterá su informe final a la Comisión Ejecutiva del COI, que se reúne el miércoles con su presidente Thomas Bach al frente. Ahí podrían decidir el retiro de la AIBA. El COI asumiría directamente la organización del torneo olímpico y también de las competiciones clasificatorias para el mismo.


























