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Una meta ha tenido clara desde muy joven, la ingeniera y matemática María Alejandra Zapata: trabajar en la NASA, más exactamente en el Laboratorio de Propulsión a Reacción o Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL, por sus siglas en inglés) de esta institución espacial estadounidense. Es consciente de que el camino a recorrer no es fácil, pero es un sueño que ha guiado sus decisiones académicas y profesionales desde que nació en ella el amor por la exploración de otros mundos.

Con el plan en mente, exploró la posibilidad de estudiar dos carreras en la Universidad del Norte, gracias a la oportunidad de cursar dos programas académicos de manera simultánea. En su caso se inclinó por Ingenierías de Sistemas y Matemáticas. “Me decidí por estas carreras porque siempre he soñado con programar un Rover que se encuentre en otro planeta. Al inicio, me inclinaba más por la ingeniería aeroespacial o la astrofísica, sin embargo, estas no se ofrecían en muchas universidades de Colombia. Me di cuenta de que ingeniería de sistemas junto con matemáticas sería una excelente combinación para lograr mi sueño”, dijo María Alejandra, quien, en la ceremonia de los Premios a la Ingeniería Nacional de la Sociedad Colombiana de Ingenieros, que se llevó a cabo el miércoles, 29 de mayo, recibió la distinción Lino de Pombo.

El Premio Lino Pombo lo otorga la Sociedad de Ingenieros de Colombia como reconocimiento a egresados de ingeniería de cualquier universidad del país que estén acreditado por el Ministerio de Educación; que haya terminado su carrera durante el último año calendario y que haya obtenido el máximo promedio acumulado de calificaciones durante su etapa de estudios. “El Premio Lino de Pombo es muy prestigioso entre los ingenieros. Que lo reciba una egresada nuestra es un orgullo para la comunidad uninorteña, pues reconoce la calidad de los profesionales que se forman en la universidad. Le va a abrir muchas puertas a María Alejandra, porque pone en primer plano la ingeniería costeña, la que se hace desde Uninorte, y la pone en el radar de las diferentes asociaciones que se congregan en la Sociedad Colombiana de Ingenieros', asegura Julián Arellana, decano de Ingenierías de Uninorte, quien explica además que María Alejandra fue medalla de plata de su grupo de Ingeniería de Sistemas, máxima distinción que otorga Uninorte a los egresados por programa académico durante ceremonia de grado, y medalla de plata, también en Matemáticas.

Fotos archivo EL HERALDO

Para María Alejandra, bachiller del Colegio IDPHU Campestre Bilingüe y quien fue beneficiaria del Programa Institucional de Becas y Apoyo Financiero con la Beca Uninorte, el éxito que ha tenido académicamente es un conjunto de perseverancia, disciplina y balance, que siempre fueron sus bases para afrontar los retos que le llegaban cada día al estudiar dos carreras exigentes. La destreza que adquirió al mezclar ambos pregrados le permitió afrontar los problemas con una perspectiva más amplia.

En este punto reconoce que la etapa de aprendizaje en Uninorte impactó positivamente su desempeño profesional. “Fue el principal lugar donde viví las experiencias de aprender y trabajar de manera independiente por lo que amas, y donde hice amistades que llevaré para toda la vida. Mis profesores también fueron clave, entre ellos Rocío Ramos, de Ingeniería de Sistemas, quien me incentivó sobre el valor de una mujer en una carrera como esta, y Álvaro González, de Matemáticas', señaló la joven.

Su desempeño académico la hizo merecedora de la Medalla de Plata en Ingeniería de Sistemas y Matemáticas, que reconoce al graduando de cada programa que obtuvo el mejor promedio de esa promoción. Al tiempo que terminaba ambas carreras, se fue de intercambio para alcanzar la doble titulación en University of South Florida (USF), donde recibió el título de Computer Science. Fue un reto diferente, pero que sacó adelante con el tesón de quien sabe para donde va. De hecho, su padre Emilio Zapata confirmó que María Alejandra siempre ha sido una mujer de objetivos, que se esmera por dar lo mejor y aseguró que desde tempranamente visualizó la doble titulación con USF.

“En USF no solo crecí como profesional, sino también como persona. Salí de mi zona de confort. Gracias a mis padres y su apoyo, siempre he tenido la oportunidad de perseguir mis sueños, pero mandar a tu hijo a otro país no es nada económico. Me gané una beca para ir a USF, tuve apoyo de mis padres y, aun así, me tocó trabajar y estudiar al mismo tiempo para poder tener lo suficiente; sinceramente, había días que no alcanzaba. Trabajé como barista en un café todo mi año en USF”, contó.

En la actualidad trabaja como Full Stack Developer de aplicaciones web y móviles en una empresa llamada Advocate Health Advisors, en Estados Unidos, en donde está vinculada desde hace casi un año. Dentro de los logros que ha tenido en esta experiencia destaca el desarrollo de una aplicación móvil para la empresa, a través de un proyecto que le fue asignado desde cero. Tuvo tres meses para hacerlo, tiempo en el que debía abarcar desde testeo, backend, frontend, hasta ciberseguridad.

El decano Arellana cataloga a María Alejandra como un ejemplo a seguir para todos los estudiantes de ingeniería de la universidad, porque es el tipo de estudiantes que aprovechan todas las oportunidades que se le ofrecen en la institución. “Es una inspiración para los estudiantes que quieran crecer profesionalmente, formarse como personas, para que aprovechen todas las oportunidades que se brindan a nivel institucional y cumplan con los sueños que se han propuesto”.

Para María Alejandra el camino de sus sueños continúa. Además de adquirir experiencia laboral, ya tiene previsto dar el siguiente paso académico con el estudio de una maestría en Estados Unidos, posiblemente con un enfoque en inteligencia artificial. Sus retos profesionales no son menores, como liderar misiones de la NASA, pero está segura de que la vida se trata de eso, de trazarse metas grandes y luchar con tenacidad para hacerlo posible.

Con todo este camino recorrido, es concisa a la hora de aconsejar a aquellos estudiantes que, como ella, se permiten soñar en grande. “Sé tu propia hada madrina. Este mensaje ha sido clave para mí en toda mi trayectoria. Nada te va a llegar por arte de magia. Todo lo que llega es fruto de lo que atraes, y lo que atraes es fruto de lo que haces en tu día a día. Te van a decir mil veces ‘no’ hasta que llegue solo un ‘sí’”.