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El expresidente Álvaro Uribe Vélez calificó de “miserable” la compulsa de copias que la Jueza Tercera Penal del Circuito Especializado de Medellín, Claudia Castro, ordenó enviar a la Fiscalía General de la Nación para que lo investigue a él y a su hermano, Santiago Uribe, así como al general (r) Carlos Alberto Ospina, como “presuntos determinadores del homicidio” de los defensores de derechos humanos Eduardo Umaña Mendoza y Jesús María Valle Jaramillo.

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La jueza ordenó investigar ese caso tras emitir este lunes una condena de 28 años de cárcel contra José Miguel Narváez Martínez, exdirector de Inteligencia del desaparecido Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), por haber sido determinador delsecuestrode la fallecida senadora Piedad Esneda Córdoba Ruiz, perpetrado el 21 de mayo de 1999.

En el fallo, la jueza Claudia Marcela Castro declaró a Narváez responsable del delito de secuestro extorsivo agravado, por lo que además de los 28 años de prisión, lo inhabilitó por veinte años para ejercer cargos públicos.

Además, el fallo declaró el caso como “delito de lesa humanidad”, lo que implica que las investigaciones para hallar a los culpables no prescriben.

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En la investigación se estableció que Narváez, que fue funcionario del DAS entre 2005 y 2006, durante el Gobierno de Álvaro Uribe, visitó al exjefe paramilitar Carlos Castaño Gil y le “propuso retener y asesinar a Córdoba Ruiz con la idea de que era colaboradora del ELN (Ejército de Liberación Nacional, guerrilla)”, dijo la Fiscalía.

Precisamente la jueza pidió la investigación contra el expresidente porque en el proceso por el secuestro de Piedad Córdoba un testigo mencionó una reunión celebrada en 1997 en la que supuestamente participaron los hermanos Uribe y el militar para discutir el asesinato de líderes sociales de esa época en la que Álvaro Uribe era gobernador del departamento de Antioquia.

Eduardo Umaña Mendoza, profesor de Derecho Penal, fue asesinado el 18 de abril de 1998 en su casa en Bogotá, mientras que Jesús María Valle Jaramillo fue asesinado el 27 de febrero del mismo año en Medellín.

Álvaro Uribe reaccionó en su cuenta de X a la petición de la togada calificando de “fantasiosa” la declaración del testigo “investigada hace años, sobre una reunión inexistente”.

“Qué rabia política en fallos contra mí, basta ver las personas que supuestamente estábamos en esa reunión, además del sitio, para concluir como concluyó la Fiscalía en la época que esa declaración fue mentirosa”, escribió el expresidente en la red social.

Agregó: “Después asesinaron a Villalba, trataron de acusarme, nada dijeron cuando se supo la realidad de ese crimen. El Dr Narváez fue declarado insubsistente, lo hice por solicitud de su jefe, el entonces director del Das”.

Seguidamente, Álvaro Uribe denunció que el “mentor” de la jueza que ha ordenado la investigación en su contra es un enemigo suyo desde hace muchos años.

“El mentor de la juez, un tiempo fiscal, Pinilla Cogollo, fue integrante del M19, declarado enemigo mío desde la juventud. Ha utilizado la justicia para matar la moral de quienes hemos podido sobrevivir al atentado terrorista”, concluyó.