En conmemoración al día del donante de órganos, la joven Karol Mariana Acosta contó que luego de varios meses se despidió de su corazón artificial e inició una vida con el trasplante de corazón humano.
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Aunque la joven llevaba una vida normal, a excepción de no poder meterse a una piscina o al mar, estuvo en la lista de espera por casi un año para poder realizarse el procedimiento y encontrar un donante.
El corazón artificial lo tuvo 3 años y unos meses y para la joven 'fue una experiencia magnífica en la que pude experimentar muchas cosas que no podía hacer con la cardiopatía'.
De acuerdo con Leonardo Salazar, del programa Corazón Artificial, de la Fundación Cardiovascular de Colombia, Acosta llevaba varios meses sin poder estudiar y estaba hospitalizada en cuidados intensivos pues prácticamente la habían desahuciado. 'Estaba como en la expectativa de qué se iba morir', dijo.
Con la llegada de un nuevo trasplante, el proceso implicaba llevar a cabo una buena logística y aprovechar el tiempo porque estaba en juego su vida. 'Desde que se cierra la circulación del donante y se extrae al corazón, se preserva con una solución, se pone hielo, hasta que se abre y le vuelve a pasar circulación idealmente menos de cuatro horas', manifestó el doctor Salazar.
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En cuanto al procedimiento, se supo que la joven ingresó al quirófano alrededor de las 6:00 a. m. con el objetivo de extraer su corazón artificial y, posterior al procedimiento, se empezó a trasplantar el corazón donado a las 7:30 p.m.
Luego de percatarse que su corazón latía con normalidad —después del trasplante— salió de cirugía. Karol Mariana contó que fue difícil no tener el corazón artificial. 'En un momento lo tenía y al otro ya no. A las 2:00 a.m. me levantaba llorando, buscando la maleta, porque no la encontraba y fue duro'.
Por último, la madre de la joven expresó agradecimiento a la persona que quiso donar el corazón humano pues ahora su hija llevaría otro estilo de vida.
'De verdad valoro mucho esa mamá que me dio la oportunidad de que mi hija esté acá conmigo. ¿Qué más puedo decir?', puntualizó.
