Solo hasta ayer las autoridades de Malta (Europa) entregaron los documentos de la inspección al cadáver del cesarense Pablo Muñoz, de 25 años, quien se ahogó en un balneario el pasado 12 de septiembre en un balneario de ese país insular.
Esta información era primordial en los trámites que adelanta la cancillería de Roma, para repatriar el cuerpo del joven administrador de empresas que murió el día de su cumpleaños cuando decidió ir a un paseo con dos amigos en un sector turístico.
'Todo está transcurriendo muy bien, gracias a Dios hemos tenido mucho apoyo de la cancillería de Roma, es un poco distante, pero en Malta ya se encargó a una persona que está gestionando todo', manifestó, Ángela Padilla, madre del joven.
Pablo y sus amigos viajaron hasta la laguna de Coral, un lugar paradisiaco en Malta que es muy visitado por turistas.
La madre cuenta que su hijo se lanzó a la piscina natural, nadó varios metros a mar abierto pero que la fuerza del agua no lo dejó avanzar. Las autoridades reportaron su desaparición a las 4:35 p.m. Luego fue hallado ahogado en el fondo del mar.
El otro amigo que lo acompañaba, de nacionalidad mexicana, sobrevivió agarrándose de una roca.
Preparan homenaje.
Se espera que en la próxima semana el cuerpo de Pablo Muñoz sea trasladado a Valledupar, donde sus compañeros de estudio con los que se graduó en administración de empresa en la Universidad Popular del Cesar, le realizarán un homenaje, posteriormente será trasladado al corregimiento de Zapatosa, jurisdicción de Tamalameque (Cesar), para ser sepultado.
Muñoz Padilla viajó hasta ese continente con apoyo de su familia en busca de perfeccionar el inglés, pero encontró la muerte, coinciden hoy sus antiguos compañeros de aula.
Ángela recuerda que su hijo contactó a un representante de esa escuela en Malta, que estaba en Colombia y empezó averiguar en qué sitio le parecía mejor teniendo en cuenta que hay varias sedes.
'A él le gustó Malta, entonces empezamos hacerle los trámites, iba a viajar en febrero pero no se pudo porque era un viaje muy costoso y no habíamos conseguido el dinero, fue difícil conseguir el dinero y los requisitos, por lo que se acordamos que viajara en junio con mucho esfuerzo'.
De acuerdo con lo programado, el joven cesarense tenía planeado regresar a Colombia a mediados de noviembre apenas se terminara el curso de inglés.
Proyecto de vida
Con el fallecimiento de Pablo Muñoz, se fueron también las esperanzas que tenían sus padres Ismael Muñoz y Ángela Padilla de verlo convertirse en un gran profesional.
'Mi hijo tenía un proyecto de vida grande, quería perfeccionar su inglés para conseguirse un buen trabajo. Era un buen hijo, buen hermano, dedicado a sus estudios, no le gustaba tomar licor y era muy amigable con muchas amistades', dijo su mamá.
Ahora su familia solo cuentan los días para tenerlo de regreso y poder sepultarlo en su natal Zapatosa.


