Tras una reunión de varias horas, el alcalde de Cartagena, William Dau Chamatt, y comunidad de las zonas turísticas de Barú, Playa Blanca, Santa Ana y Ararca, fijaron este lunes siete medidas que buscan mejorar la seguridad en esos balneario, luego de los incidentes registrados en el final y comienzo de año.
En el encuentro, Dau Chamatt aseguró que: 'Vine principalmente a poner orden para evitar accidentes marítimos que tanto daño le hacen a las personas y a la reputación de esta ciudad, además se implementarán de manera inmediata las medidas relacionadas con salubridad y seguridad con la intensificación de operativos'.
Fue enfático al asegurar que ejercerá la autoridad que hace falta para superar estos problemas.
'Si todos cumplimos la ley se puede convivir en armonía y en pro de la prosperidad de este territorio', agregó.
Las medidas.
Entre las medidas que van a implementar hacen parte definir los puntos de entrada y salida de lanchas, 3. limitar número de personas que ingresan a Playa Blanca tanto por vía terrestre como marítima y controlar los operadores turísticos ilegales.
De ahora en adelante, las comunidades nativas serán las coadministradoras de estas playas en alianza con la Alcaldía Distrital.
Otro de los puntos fijados es que los servicios recreativos serán bicicletas y embarcaciones de remo y no en Jet Sky y donas para evitar riesgos de amenaza al parque.
También habrá estricto control a las embarcaciones que tendrán que contar con permisos de zarpe y operación actualizados; pilotos entrenados y certificados con licencias; medidas de seguridad como chalecos. Además las embarcaciones deberán pagar por el ingreso a Playa Blanca.