
‘Putin’ y ‘Maduro’ no se perdieron el regreso de la Batalla de Flores
Un bloque de disfraces individuales y colectivos dio inicio al desfile en el cumbiódromo. Luego de una tregua de la covid, de varias olas ‘saltadas’, las risas volvieron a la Vía 40.
Después de dos años sin celebraciones masivas por la pandemia, los asistentes a la Vía 40 volvieron a presenciar este sábado, en medio de la Batalla de Flores, la creatividad de los hacedores para darle vida a costumbres, a personajes ficticios o reales, o, más allá, para escenificar situaciones de la vida cotidiana, a través de los disfraces.
El primero en encabezar el recorrido fue el comandante Hugo Chávez, quien iba acompañado de un grupo de colaboradores que le daban agua, con permanencia, para mitigar el sol y el calor.
Llevaba puesto su tradicional boina, el uniforme verde oliva con sus botas militares e iba saludando de lado a lado a la gente apostada en palcos y minipalcos.
Juan Ruiz, su nombre real, dijo en medio del bullicio, que lo más gratificante, después de ese receso obligado, era volver a ver al público.

“El Carnaval es una medicina, es un ánimo para los carnavaleros, para todos, tengo 22 años en el Carnaval, los mismos que nuestra fundación Fundicarnaval”, mencionó.
Ruiz mencionó que se buscaba el apoyo de las autoridades para preservar los disfraces y otros grupos folclóricos que hacen parte de las carnestolendas.
Incluso, uno de los asistentes le gritó: “Buena comandante, va’ pa’ lante”, uno de los viejos mensajes que usaba el propio Chávez, en medio de sus campañas en Venezuela.
El presidente ‘Nicolás Maduro’ se llevó abucheos a lo largo del recorrido, pero Víctor Manuel Turizo, quien lo personificaba, expresó que es parte del escenario que rodea al mandatario venezolano.

“Llevo cinco años personificándolo, vengo desde Valledupar para que no muera esta tradición, soy docente de filosofía y quiero contribuir a la cultura del país y de Barranquilla”, mencionó.
Piedad Córdoba, Raúl Reyes, Tirofijo y Jesús Santrich también participaron del desfile.
Más atrás, después del paso de carrozas y grupos folclóricos, apareció el popular payaso ‘Cara Sucia’. Era José Fernando Herrera, quien lleva más de 58 años participando de los eventos del Carnaval. “Yo estaba triste por estar encerrado, me gusta que me vean, qué vaina linda este poco de gente”, afirmó a su paso, en una silla de ruedas, impulsada por un familiar.
Sin embargo, la originalidad la impuso el Vladimir Putin ‘quillero’ con su atuendo sobrio, de vestido entero, pese al calor que hacía en plena Vía 40. En el ojo del huracán, por su posición de atacar a Ucrania y sus choques con otras potencias mundiales, iba saludando de palco en palco, sin seguridad.

Además, sin protocolos de bioseguridad, se llevó abrazos del público cada vez que se acercaba a las vallas de seguridad y, en su ruso ‘quillero’, un vacilón de amigos, pedía vodka y mujeres.
“Bájensen, me siento muy bien, me gustan las muchachas y el vodka”, mencionó el mandatario nacido en ‘Quilla’, en medio de un séquito borrachón.
Otro de los que se llevó los aplausos del público fue Freddy Krueger, por todos los elementos iguales al personaje de la película, de vieja data para muchos.
Lenin Castro Orozco, quien lo personificaba, señaló que usaba látex, vinilo y acronal, para que no se escaparan detalles de la máscara del personaje del cine de terror.
