Incendio en la vía 40: familiares y compañeros recuerdan al sargento Solano como un excelente ser humano

El sueño que tuvo desde niño Javier Enrique Solano Ruíz fue ser bombero, relata su padre mientras tiene a su izquierda el féretro con el cuerpo de este héroe, que perdió la vida mientras atendía el voraz incendio que hoy consume los tanques de almacenamiento de hidrocarburos de la empresa Bravo Petroleum, en la Vía 40.

Mientras las lágrimas caen por sus mejillas, don Óscar Solano recordó que inicialmente se opuso a la decisión que tomó su hijo de ser bombero, pues sabía que de los riesgos que este oficio tenía.

'Cuando lo vi vestido de bombero no pude hacer más nada, tuve que quedarme contento y orar todo el tiempo por él. Yo le decía que no se fuera a meter a las llamas cuando había incendios o emergencias, porque se podía quemar, la respuesta de él siempre era que no le iba a pasar nada, que él con las mangueras controlaba todo', expresó el padre del sargento Javier Solano con la voz entrecortada.

De sus 53 años de vida, dedicó 26 al servicio a la comunidad. Siempre presto a ayudar a los demás, logró obtener importantes reconocimientos por su desempeño dentro del Cuerpo de Bomberos de Barranquilla.

'Él desde niño me decía que quería ser bombero porque quería ser un héroe', relató el adulto mayor antes de romper en llanto.

Desde que el cuerpo llegó a la sala de velación dela funeraria Los Olivos en la carrera 38, Malca Irina Diazgranados Caro, quien fue su compañera sentimental durante los últimos 22 años, no se ha separado un segundo del féretro. Con la mirada perdida y las pocas lágrimas que aún conserva, recordó a su esposo como una 'gran persona'.

Recordó que, en la mañana del miércoles, tuvo conocimiento de la emergencia gracias al reporte que un periodista realizó por medio de una emisora cristiana.

'Yo ya presentía todo, porque me levanté y escuché el reporte de la emisora. El periodista dijo que hay una urgencia de tres bomberos heridos y otro fallecido. En ese momento llamé a mi hermano y le pedí que averiguara si era Solano el que había fallecido, pero yo sabía. Yo sentía en mi corazón que era él', sostuvo la afligida mujer.

En su relato, Diazgranados fue enfática al sostener que su hermano fue el encargado de darle la mala noticia, dado que nadie la llamó a contarle lo sucedido. 'Él no me avisó que iba a salir a atender la emergencia porque ya yo estaba dormida'.

En medio de las lágrimas e intentando asimilar lo sucedido, la compañera sentimental del sargento Solano Ruíz contó a esta casa editorial que, al momento de la emergencia él se encontraba en la Estación de Bomberos de Las Flores, y aunque su base era la Estación 11 de Noviembre, realizaba las vacaciones de uno de sus compañeros en el punto mencionado inicialmente.

'Él salía hoy jueves (22 de diciembre) de vacaciones y teníamos planeado un viaje en familia. Esto es muy duro, pero Dios me ha dado la fortaleza para asumir esto', enfatizó la mujer, quien añadió que, 'en más de una oportunidad me recalcó que cuando le pasara algo lo primero que iba a hacer en la clamar a Dios'.

Quien se ha mantenido en pie pese a las difíciles circunstancias que atraviesa es Karol Solano Mercado, hija del sargento fallecido. Recibió la trágica noticia en medio del turno, pues siguiéndole los pasos a su padre también se dedicó a este oficio, con la diferencia de que está adscrita al Cuerpo Voluntario de Bomberos de Malambo.

'Me enteré porque iban a despachar una máquina en apoyo a Barranquilla, pero suspendieron la salida porque nos dijeron que un bombero había fallecido. Me dijeron su nombre y me derrumbé', dijo la joven de 22 años mientras secaba sus lágrimas.

Su mente recordó que, desde muy niña, su padre la inspiró a seguir por este camino de valentía y fuerza, tanto así que sus regalos de Navidad siempre estaban relacionados con los bomberos, incluso, para su cumpleaños y el de su hermano, los 25 de diciembre, el sargento Solano los llevaba a la estación para que conocieran lo que tanto le apasionaba a él.

'Cuando tomé la decisión de seguir su ejemplo, me decía que estaba muy orgulloso. Mi papá fue clave en mi formación como persona y como bombero, es un dolor muy grande y que no puedo describir. Sé que mi papá se fue feliz, haciendo lo que tanto amaba, fue una persona correcta siempre, un hombre intachable. Mi gran ejemplo', destacó la joven.

Hasta la sala de velación llegó el teniente de la Estación de Bomberos Calle 17, Edwin Pacheco Ruíz, y también presidente del Sindicato de Bomberos de Barranquilla, quien conversó con EL HERALDO sobre su cercanía con el sargento Solano y lo destacó como un funcionario honesto, alegre y querido por todos.

'Creció en la institución y se ganó el cariño de todos. Entregó su vida por salvar el bien y la vida de sus demás compañeros. Javier Solano deja a un Cuerpo de Bomberos huérfano porque se nos acabó de ir en ese féretro un pedacito de nosotros', reveló Pacheco.

Se tiene previsto que este viernes se dé cristiana sepultura al sargento Javier Enrique Solano Ruíz, ese héroe que quedará por siempre en la memoria de los barranquilleros, por su ejemplo de valentía, servicio y solidaridad con quienes lo rodeaban.

De acuerdo con sus familiares, hacia las 2:00 de la tarde el cuerpo será trasladado hasta la Estación de Bomberos 11 de Noviembre para el oficio religioso, y posteriormente se llevará hacia el Parque Cementerio Los Olivos.