Wilson Isaquita Guarín se sentó la tarde de este viernes bajo la sobra fresca de un árbol de mango a contemplar la calle que hasta hace poco era un polvorín en jornadas soleadas y un lodazal en días de lluvia. Se trata de las calles 40 y 41, conocidas en viejas épocas como las calles Santander y Bolívar, respectivamente, entre las carreras 51 y 53 B.
Lea más: Alerta por intento de estafas a beneficiarios de CrediChévere
Eran las únicas esquinas que le quedaban al populoso sector de Barrio Abajo por ser pavimentadas. Los únicos tramos de un barrio fundado en los albores de la ciudad, hace 167 años, el 11 de noviembre de 1857; que a pesar de albergar –casi desde sus inicios– un sector industrial, en pleno siglo XXI fue que pudo llegar a apreciar completamente el desarrollo y salir del rezago que sin querer encierra el conocido y nostálgico apodo de ‘La Arenosa’.
“Yo vivo por acá hace 50 años, aquí en el Barrio Abajo. Este barrio es de los primeros de Barranquilla. El pavimento le dio vida y estamos muy felices de eso. Que sigan haciendo esos proyectos, así es que vamos para adelante a una Barranquilla linda”, pidió.
Aquel sector está lleno de fábricas y bodegas, reflejando el espíritu industrial del Distrito. Tanto es así que Wilson se desplazó en su memoria a cuando tenía 19 años, cuando un día de lluvia les hacía bajar a hombro toda la materia prima de los camiones, que se atascaban en el barro.
“Mi primer trabajo fue en esta cuadra, en una fábrica de pastas, muchas quedaban por aquí. Cuando llovía, todo esto era barro. Era difícil, porque un camión de esos cargados para pasar por ahí era complicado. Pero ahora no, ahora mira, todo ha cambiado, mira como transita”, dijo mientras apuntaba uno de los camiones estacionados en la calle.
Intervención al barrio
Buscando terminar con esta historia, el alcalde Alejandro Char lideró el proceso de finalizar estas dos calles y las mismas fueron entregadas a la comunidad.
“Barrio Abajo ya tiene sus calles 100 % pavimentadas. Más dignidad y bienestar para nuestra gente. Entregamos 535 metros lineales de vía pavimentada en el corazón cultural de nuestra ciudad, con andenes, bordillos y la reposición del sistema de acueducto y alcantarillado”, expresó el burgomaestre en su perfil de la red social X (antes Twitter), al momento de poner la obra al servicio de la comunidad.
Y es que el Barrio Abajo, entre sus numerosas casas clásicas de fachadas republicanas, tiene su encanto, es muy acogedor, incluso, seductor.
Jorge Luis De Ávila nació en los Estados Unidos, tiene la doble nacionalidad y hace 30 años llegó al barrio para quedarse a vivir. Ahí los vecinos lo bautizaron como ‘El Gringo’. En su celular conserva una foto tomada en el 2009, posando en la misma calle llena de polvo y tierra que hoy está impecable.
“Esto era todo un tierrero, se formaba un charco de barro. Aquí hacíamos todos los fines de semana unos asados entre todos, puedo decir que todos los 31 de diciembre veníamos con los compañeros aquí”, rememoró.
Una de las principales ambiciones de la comunidad de este sector era que por fin el barrio recibiera la pavimentación que la hacía falta, para seguir creciendo como espacio emblemático que representan.
Es por eso que el alcalde Char expresó que “con esta obra, cumplimos el deseo de la comunidad: tener su barrio totalmente pavimentado. En total, fueron dos kilómetros intervenidos en 13 tramos. Seguiremos cuidando y manteniendo las vías ya entregadas, porque este importante sector de nuestra ciudad merece seguir escribiendo una historia de progreso”.
Lea más: Ideam pronostica fuertes lluvias durante este fin de semana en la región Caribe
A futuro, la administración distrital evalúa crear un museo a cielo abierto en esta parte de Barrio Abajo, debido a que “este es el sector de la Fábrica de Cultura, del Museo Moderno de Barranquilla, del Amira de la Rosa, del parque Cultural del Caribe, del Museo del Carnaval. Un sector como este no existe en Colombia con tanto valor patrimonial y cultural”.
