Alrededor de la muerte siempre han existido mitos. Lo cierto es que después del fallecimiento no acaba todo, y no precisamente en términos metafísicos, sino por medio de las redes sociales que se mantienen activas durante meses e inclusos años. Ahora, ¿qué sucede con esa identidad digital?
Hoy no solo se debe hablar de un testamento que contenga los bienes físicos, sino que se deben incluir, a su vez, ese conjunto de elementos que se dejan alojados en la 'nube'. La importancia de lo que suceda con el legado digital está a la par del destino que tendrán las pertenencias del fallecido.
El jefe de Testamentos, Sucesiones y Planificaciones de Lifetime en Saga estableció para The Telegraph en una ocasión que 'las cuentas registradas en todo, desde las páginas de medios sociales, proveedores de correo electrónico, páginas menores Online y cuentas bancarias virtuales, contienen información sensible que debería ser removida. Esto es especialmente importante cuando se trata de las cuentas bancarias'.
Las redes sociales se han convertido, de alguna manera, en la forma de recordar a las personas después de su partida. En ellas queda almacenada la identidad del usuario o al menos, su identidad virtual.
Basada en esta huella digital, Renata Cabrales, periodista especialista en Tic's opina que, 'todos los días se debe construir una buena historia digital. Básicamente ser respetuoso con las apreciaciones, no utilizar la mentira y no alimentar odios rencores. Esa historia que construyes día a día hace que dejes un buen rastro digital'.
Las redes sociales tienen distintas políticas que le brindan opciones a los usuarios sobre qué pueden hacer con sus cuentas, sin embargo son pocos quienes las conocen.
Por otro lado, también existen compañías dedicadas a brindas asesoramiento sobre cómo proceder con el testamento digital, y otras dan la opción de dejarle una despedida a los seres queridos.
Riesgos de no dejar un legado virtual
Los perfiles que deja un fallecido en sus redes sociales y que son abandonados por completo quedan a merced de hackers, ciberdelincuentes o spambots. En otras ocasiones, el manejo de las cuentas pasa a manos de un tercero que puede que no tenga buenas intenciones. El robo de identidad es uno de los delitos más comunes que ocurre con los perfiles, siendo los de famosos o influencers los más apetecidos por el gran número de seguidores que poseen. La mejor opción es preparar un testamento.