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El año de 1994 sería el de la consagración para el recién fallecido actor Peter Greene, quien había debutado en una serie policíaca de los 90, Hardball, para luego incursionar en el cine junto a Edie Falco en Leyes de gravedad.

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En 1992 protagonizó el thriller independiente Clean, Shaven, que se estrenó en el Festival de Cannes con buenas críticas. Pero dos años más tardes, este estadounidense que se especializó por encarnar personajes antagónicos, trabajaría en las dos películas más populares de su carrera: Pulp Fiction y La máscara, ambas estrenadas en 1994.

En la película de Quentin Tarantino interpretó a Zed y en la comedia de Jim Carrey al villano Dorian Tyrell, siendo ambos personajes malévolos que sacaban partido de la característica mirada de Greene.

Más adelante apareció en Sospechosos habituales y Training Day, para sobre todo aparecer desde entonces en producciones discretas. Caso de Ambición peligrosa, Impacto mortal o la comedia de Martin Lawrence De ladrón a policía, aunque desde luego no dejó de trabajar durante el siglo XXI.

CortesíaZed, el guardia de seguridad de Pulp Fiction de Quentin Tarantino.

La adaptación de 2005 de La guerra de los mundos que no era de Spielberg, la serie Life on Mars, la comedia con Jennifer Aniston Exposados… también tuvo un pequeño papel hace un par de años en la serie The Continental: Del universo de John Wick.

Por todo esto y más, Peter Greene, de 60 años, gozó de una buena reputación y se convirtió en uno de los villanos más queridos de Hollywood.

El cuerpo de Greene, de 60 años, fue hallado el viernes inconsciente en su apartamento y declarado muerto allí mismo, según la policía, y Gregg Edwards, su representante durante más de 10 años, que lo confirmó al diario estadounidense.

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El forense determinará la causa de la muerte, aunque la Policía no sospecha que haya ocurrido nada ilícito