Toda la pasión salsera que le ha transmitido su padre, Luis Francisco Ovalle Llinás, fue determinante para que Isabella Ovalle Martínez, capitana de la comparsa juvenil del Country Club, rindiera honores a este trepidante género musical en su noche de coronación.
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Y es que la salsa siempre ha gozado de gran aceptación en Barranquilla, son varias generaciones las que han disfrutado con esta singular mezcla de ritmos como: Son Cubano, Guaguancó, Boogalo, Mambo, Guaracha, Jazz, Blues, entre otros.
El concepto de Salsa fue propulsado en Nueva York en la década de los 60’ por figuras como el legendario Johnny Pacheco. Inspirada en este fenómeno musical y también en la experiencia que le dejó haber realizado el año pasado un programa preuniversitario en ‘La Gran Manzana’, Isa lideró la puesta en escena denominada ‘Un verano en Nueva York’, toda una oda al orgullo latino en el mundo.
Así se llama uno de los clásicos de El Gran Combo de Puerto Rico, cuya pista sirvió para titular el show de esta joven de 17 años que cursa undécimo grado en el Colegio Marymount.
La maestra en danza Julie Henríquez de Donado, directora artística de la puesta en escena, detalló que contaron con la asesoría del experimentado hombre de radio Ley Martin, gran conocedor de la historia salsera, quien les tejió la hoja de ruta del espectáculo. El productor musical, Ricardo Lemus, garantizó una experiencia sonora excepcional, mientras que la producción general del evento estuvo en manos de Mauricio Cherkes.
La salsa también está ligada al continente africano y por ahí empezó la propuesta, con algunos instrumentos como los tambores que marcaron los pasos de los cerca de 150 bailarines juveniles que estuvieron en tarima este sábado en el Salón Jumbo del Country Club.
'Se representaron escenas de los populares salones de baile como el Palladium y el Apollo, también nos fuimos por barrios como Harlem donde se concentra gran parte de inmigrantes latinos, especialmente de Puerto Rico, Cuba, República Dominicana y Colombia, que se apropiaron de la Salsa. Es allí donde se acuña la palabra Salsa y se convierte en lo que es en la actualidad', explicó a EL HERALDO la maestra Julie de Donado.
El evento fue presentado por Ley Martin, quien agregó su carisma y profesionalismo al espectáculo. Además, después de la comparsa los socios disfrutaron de actuaciones en vivo de Chelito de Castro y su orquesta, Natalia París en su mejor faceta de DJ y el reguetonero Dálmata, quienes mantuvieron la energía en todo momento.
Sonaron los clásicos
Canciones como ‘Acuyuye’, ‘Jala jala’, ‘Un verano en Nueva York’, ‘En Barranquilla me quedo’, un homenaje a Celia Cruz y el baile junto a su padre, marcaron los momentos cumbres del espectáculo en el que Isa Ovalle demostró todo su swing salsero, ese que ha cultivado desde niña.
Desde los dos años Isa estuvo en la academia, comenzó bajo la guía de la maestra Gloria Peña y después estuvo en Ballet Barranquilla. Posteriormente, tuvo la oportunidad de ser capitana infantil del Country Club en el 2018, y desde entonces hizo parte de la escuela de Julie de Donado, participando en varias competencias a nivel nacional e internacional.
'Isa lo ha disfrutado, ella ve el baile como un estilo de vida, la apasiona tanto que no mide las horas que le tiene que dedicar al día. Toda esa disciplina y energía que le impregna, se vio reflejada en su actuación con la comparsa juvenil', dijo Anabella Martínez, madre de Isabella y rectora del Colegio Marymount.
Bailando en La Troja
Julie Henríquez de Donado anotó que todo buen amante de la salsa en Barranquilla ha 'azotado baldosas' en La Troja, por lo que es precisamente en ese lugar donde se realizó una de las escenas memorables.
'En La Troja derrochó toda su sabrosura y luego en compañía de la comparsa bailaron otros ritmos como Champeta y Música Urbana, algo que les fascina a los jóvenes de hoy', agregó la maestra Julie.
Finalmente, Anabella Martínez contó que una vez culminó el show, su hija le manifestó que 'quería hacerlo nuevamente' y que se sentía 'muy satisfecha y orgullosa de haber logrado todo lo que había visionado'.
'Ella participó en todas las decisiones de la comparsa, desde la música, la escenografía y los vestuarios. Isabella se metió muy de lleno en el proyecto, así que ver todo materializado la llenó de ganas de seguir bailando'.


