Un total de 54.870 especies, entre animales vertebrados, invertebrados, plantas y vegetales, habitan en los mares, selvas y páramos de Colombia, una majestuosa variedad que lo ha catalogado como el segundo país más biodiverso del mundo después de Brasil.
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Sin embargo, sus condiciones de vida son cada más extenuantes. Y es que de los 7.691 animales registrados en la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (Iucn), 787 están incluidos en su lista Roja, aquella que clasifica a las especies en riesgo de extinción global.
Entre ellos se encuentran la danta de páramo, cocodrilo del Orinoco, nutria gigante de río y de las especies caribeñas aparecen la rana arlequín y el manatí del Caribe. Además, otros animales en alerta roja son el bocachico y los peces loro.
El peligro en la Rana Arlequín
Estas ranas que pertenecen a la familia Bufonidae, un grupo de sapos neotropicales, capaces de llamar rápidamente la atención por sus llamativos colores, habitan en la Sierra Nevada de Santa Marta, lugar idóneo para sobrevivir a los enemigos que la amenazan.
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Las llamadas ‘joyas de las selvas tropicales’ gracias a su belleza se han refugiado en su gran mayoría en territorio cafetero con un total de 43 especies que actualmente podrían extinguirse.
De acuerdo con el doctor en Ciencias Biológicas, Luis Alberto Rueda, estas alarmas se vienen emitiendo desde hace 30 años y una de sus causas es la aparición de un hongo patógeno denominado Batrachochytrium dendrobatidis.
{"titulo":"Centro de Bienestar Animal estaría listo antes de finalizar junio","enlace":"https://www.elheraldo.co/barranquilla/centro-de-bienestar-animal-estaria-en-funcionamiento-antes-de-finalizar-junio-informo"}
Un riesgo que también repercute en la pérdida de biodiversidad del país y otras implicaciones ecológicas como su importancia en el flujo de energía.
'Perder estas especies podría significar una interrupción de ese flujo que va a transcurrir a través de los ecosistemas, sobre todo el intercambio de energía entre un ambiente acuático y terrestre'.
Rueda añade que las iniciativas locales son fundamentales para instruir a las personas sobré cómo pueden tratar las tierras en pro de que esta especie se conserve, así como seguir las investigaciones por parte de la comunidad científica.
Peces que requieren apoyo
Originario de la cuenca del Río Magdalena, el bocachico es otra de las especies que solicita ayuda. Este pez de agua dulce y clima tropical se está extinguiendo, según el ictiólogo Carlos Ardila por las 600 toneladas de mercurio que al año se depositan en este cuerpo de agua.
'Tiene que terminarse la deforestación, la sobrexplotación, el respeto de los pescadores, la contaminación de todo tipo de elementos residuales y mineros'.
En 2019, los desembarques alcanzaron las 14.312 toneladas de peces con cinco especies dominantes, todas migratorias: bocachico, bagre rayado, blanquillo, nicuro o barbul y capaz.
{"titulo":"A paso lento avanza el proyecto de reubicación del Zoológico","enlace":"https://www.elheraldo.co/barranquilla/zoologico-de-barranquilla-proyecto-de-reubicacion-avanza-paso-lento-984919"}
Durante la época de aguas altas permanece en las ciénagas alimentándose del detritus proveniente de la descomposición de materia orgánica de la vegetación acuática, aumentando en tamaño y peso.
'Cuando hay la subienda este migra, pero son nuestras acciones las que deben permitir que no desaparezca'.
Por su parte, el pez loro tiene su lugar en el Archipiélago de San Andrés y Providencia, en donde habitan 13 de estas especies distribuidas en arrecifes de coral del mar Rojo, Océano Atlántico, Océano Índico y Pacífico.
Se conoce que se encuentran en declive con una disminución de sus poblaciones de más del 40 % en los últimos años y podrían ser fundamentales para la conservación de arrecifes coralinos.
Manatí del Caribe: entre el rescate y la desaparición
Perteneciente a la familia Trichechidae, el manatí del Caribe es otra de las especies que protagoniza el Libro Rojo. Su gran tamaño, que lo hace capaz de comer enormes cantidades de plantas acuáticas, se vio un poco diminuto el pasado sábado cuando un bebé herido fue rescatado en jurisdicción del municipio de El Banco, Magdalena.
Los más de 800 manatíes que habitan en el país están en peligro, una alarma que según la bióloga marina Julieth Prieto, candidata a Maestría de Ciencias Naturales de Uninorte, está dada hace más de 30 años.
'Esta especie es la mal llamada vaca marina, fue aprovechada su carne por poblaciones rurales que habitan cerca a la ciénagas, donde la cacería y el tránsito de las embarcaciones la amenazaron'. Prieto manifiesta que su extinción representaría la desaparición de muchos ecosistemas y pérdida de conectividad de flujos hídricos.
