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Es prácticamente imposible que se conciba la idea de realizar las carnestolendas sin contar con la participación activa de la comunidad LGBTIQ+. Su aporte a esta fiesta va ligado estrechamente con las artes.

Pero su contribución actual se debe a años de resistencia y resiliencia ante comentarios homofóbicos y agresiones físicas a las que han tenido que enfrentarse en búsqueda de tener un espacio digno.

Pero bajo la premisa de que el Carnaval es de todos y todas, que en una fiesta que es la más distinguida manifestación de cultura y tradición, esa misma que incluye diversos sectores sociales, todos alrededor del jolgorio propio del Carnaval, un grupo de personas, entre los que se destacó Jairo Polo Altamar, decidieron salir a las calles de Barranquilla y vincularse al Carnaval.

{"titulo":"'Nosotros también somos el Carnaval': Jairo Polo","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/carnaval-de-barranquilla-2023-nosotros-tambien-somos-el-carnaval-jairo-polo-978957"}

Entre el asombro y el rechazo se observó esas primeras salidas que hizo este grupo, pues a muchos les sorprendió ver cómo personas de la comunidad gay salían con sus disfraces y atuendos bailando al compás de unos tambores hasta llegar a una discoteca.

Aquella sería tal vez la escena que dejaría atónito a más de un desprevenido transeúnte, que lejos de aprobar esto, le parecería una escena atípica en la ciudad. Pero lejos de ser un desfile que le hiciera oda a lo inmoral, ese fue el primer paso a ritmo de millo que marcó un precedente.

Esta primera movilización se registró en 1975, según reseña el libro ‘Con polleras y en tacones’ que relata la historia del Carnaval Gay y destaca los perfiles de varios miembros de la comunidad que han aportado su granito de arena en el posicionamiento de tradición carnavalera.

'Al comienzo era muy difícil porque nos maltrataban, nos criticaban, pero hoy en día el mundo cambió y nosotros debemos tener otras ideas y pensar diferente porque la cultura es muy importante para una ciudad y eso es lo que somos nosotros, cultura', manifestó Jairo Polo en diálogo con EL HERALDO al recordar los primeros años de la Guacherna Gay.

{"titulo":"Negritas Puloy: revolución y sororidad en el Carnaval de Barranquilla","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/carnaval-de-barranquilla-2023-negritas-puloy-del-barrio-montecristo-y-su-legado-979337"}

Aunque a mediados de los setenta se notaron los primeros vestigios de lo que más adelante sería la Guacherna Gay, no fue sino hasta 1984 cuando Jairo Polo junto a Alberto Sánchez, Lino Fernando, Carmelo Romero, Roberto Aljay, Jorge Álvarez, Uldarico Pallares, Jesús Gutiérrez, Joaquín Castillo, Jaime Donado, Mariluchi Correa y Eduardo Salcedo Sierra, salieran a las calles de Barranquilla dejando atrás la oscuridad del anonimato y los eventos dentro de las discotecas de la época para mostrar a la ciudad ese derroche de color, brillo y baile.

Muchos de los que integraron ese grupo eran diseñadores, estilistas y gestores culturales de la época que quedaron para la historia por participar en la primera Guacherna Gay. Por más de 30 décadas este desfile ha deleitado a los carnavaleros que han aprendido a apreciar y valorar el aporte cultural de la comunidad LGBTIQ+ en el Carnaval.

{"titulo":"Las brujas que salvaguardan el 'correo oral' del Carnaval","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/carnaval-de-barranquilla-2023-las-brujas-que-salvaguardan-el-correo-oral-de-las"}

'No fue fácil hacer este trabajo, después que uno se dedique de todo corazón a hacer las cosas bien, pues se logra. La visión que tiene el Carnaval Gay es muy grande, todavía queda más espectáculo por darle a la ciudad de Barranquilla', resalta Polo esbozando una sonrisa, pues consciente del papel que tiene como presidente de la Corporación Autónoma del Carnaval Gay de Barranquilla y el Atlántico.

Para 1997 el Concejo de Barranquilla decidió entregar un acta resolutiva que oficializó, y además legalizó, el Carnaval Gay de la ciudad. Ese mismo año nació la corporación que en la actualidad coordina todo el tema de las carnestolendas de la comunidad en el departamento del Atlántico.

{"titulo":"'Las marimonditas son repelencia, jocosidad y espontaneidad'","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/carnaval-de-barranquilla-2023-marimonditas-de-montecristo-repelencia-jocosidad-y"}

'Sin nosotros los gay no se podría hacer Carnaval porque los mejores diseñadores, estilistas somos gais. Es un engranaje que se hace en todo el año para que el Carnaval de Barranquilla ocupe ese puesto como patrimonio intangible de la humanidad', opina Polo referente al valor que vienen aportando en las diferentes áreas que influyen en la realización del Carnaval.

La celebración de la Guacherna Gay, más que un desfile, es una manifestación de respeto y aceptación para una comunidad, siendo esta expresión cultural una forma de hacerse sentir en la sociedad.

Por tal motivo el 29 de noviembre de 2017 la Guacherna Gay fue proclamada como Patrimonio Cultural e Inmaterial del Distrito de Barranquilla.

Mucho ha pasado desde aquel momento en que un grupo de personas se armó de tacones y polleras para recorrer las calles aledañas a las discotecas gais de la ciudad, hasta ser esa comunidad activa y participativa que danza y canta por sus derechos, una manifestación de cultura que busca a través del Carnaval validar su voz, o mejor, su grito de igualdad.