Cada 31 de mayo se conmemora el Día mundial sin tabaquismo, como una jornada para invitar a generar conciencia sobre los riesgos asociados al tabaquismo, además de promover políticas y programas efectivos para reducir su consumo.
En este 2024, el lema será “Comprométete a dejar de fumar”, que es una campaña a nivel mundial para invitar a los fumadores a dar el primer paso para una vida libre de tabaco.
“El Día mundial sin tabaco nos recuerda que el tabaquismo es una de las principales causas de enfermedad y muerte evitables en el mundo. Dejar de fumar es una de las mejores cosas que una persona puede hacer para mejorar su salud y reducir su riesgo de enfermedad grave. Con el apoyo adecuado y recursos disponibles, es posible dejar el tabaco y llevar una vida más saludable y libre de humo”, señala Jeffrey González, experto en adicciones y profesor de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario.
Añade el experto que desde la Pandemia del Covid-19 la invitación a dejar el tabaco debe ser aún más exhaustiva porque el cigarrillo y sus derivados causan graves enfermedades respiratorias.
“Los vapeadores generan mayor adicción a la nicotina”
Una nueva forma de fumar, que se ha difundido en el mundo en los últimos años, es la de los vapeadores o cigarrillos electrónicos. Contrario a lo que las empresas comercializadora de estor productos informan, este tipo de artefactos también generan enfermedades respiratorias y adicción a la nicotina.
Explica María Catalina Sánchez, profesora de Salud Pública de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario, que el uso de los cigarrillos electrónicos ha producido una enfermedad llamada EVALI (lesión pulmonar aguda asociada al cigarrillo electrónico o al vapeo), y por ella “se han evidenciado otros efectos respiratorios, gastrointestinales y neurológicos”.
La Universidad del Rosario señaló respecto a este tema que, según un estudio de 2023 del Observatorio sobre uso de Cigarrillos Electrónicos y Vapeadores (CEV) de la Corporación Nuevos Rumbos, realizado a 1.707 estudiantes de colegios en Bogotá, se evidenció que el 18 % había consumido cigarrillos tradicionales alguna vez en la vida, versus un 32.3 % de consumo con cigarrillos electrónicos o vapeadores. En el último mes, el consumo de cigarrillos era del 8.1 % y de cigarrillos electrónicos del 15.8 %.
“Si bien en un primer momento se publicitó como una estrategia para los fumadores de tabaco tradicional que buscaban cesar esta actividad, hoy en día su consumo no se encuentra en este nicho de personas y se presenta un aumento en la población escolar y universitaria: adolescentes, jóvenes y adultos jóvenes”, resalta la profesora Sánchez.
Con esto se evidencia que la adicción a la nicotina es dos veces mayor en los usuarios de cigarrillos electrónicos que en fumadores de cigarrillos convencionales.
Enfermedades graves por causa del cigarrillo
La Universidad del Rosario asevera que los productos del tabaco, como cigarrillos tradicionales, cigarrillos electrónicos y vapeadores, contienen más de 7.000 sustancias químicas, muchas de las cuales son tóxicas y carcinógenas, lo que aumenta significativamente el riesgo de desarrollar una variedad de enfermedades graves como las que se enumeran a continuación:
- Enfermedades respiratorias: aumento del riesgo de enfermedades respiratorias crónicas como la bronquitis crónica y el enfisema. También es un factor de riesgo importante para desarrollar cáncer de pulmón.
- Enfermedades cardiovasculares: daño del revestimiento de los vasos sanguíneos, lo que puede provocar la acumulación de placa y la obstrucción de las arterias. Esto aumenta el riesgo de enfermedades del corazón, como la enfermedad coronaria, los ataques cardíacos y los accidentes cerebrovasculares.
- Cáncer: el tabaquismo es el principal factor de riesgo evitable para varios tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de pulmón, de boca, de garganta, de esófago, de páncreas, de riñón, de vejiga y de cuello uterino.
- Enfermedades crónicas: mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la enfermedad de Alzheimer y la osteoporosis.
