En algunas partes de la Zona Norte Extrema de la Alta Guajira aún no saben que el mundo está enfrentando la pandemia del COVID-19, según afirman quienes trabajan en la única emisora que llega a tres, de los nueve corregimientos que tiene el municipio de Uribia.
Según Custodio Gustavo Valbuena representante legal de la Asociación de Jefes de familia de la Alta Guajira Wayuu Araurayu, organización que opera la emisora Ecos de la Makuira, este medio actualmente trabaja con un transmisor pequeño debido a que el equipo grande requiere de la energía de una planta eléctrica que no funciona por falta de recursos económicos.
'Con ese equipo se alcanzaría una cobertura de los nueve corregimientos, frontera venezolana y zona costanera del mar Caribe', explica. Ecos de La Makuira 90.2 FM estéreo, fue adjudicada y es vigilada por el ministerio de las Tic.
Dice que son nueve los corregimientos que hacen parte de la Zona Norte Extrema de la Alta Guajira, con una población de unos 56 mil habitantes, la mayoría pertenecientes a la etnia wayuu y que no cuentan con servicio de internet, televisión o telefonía celular y que por consecuencia, aún no conocen el alcance de pandemia del COVID-19 y mucho menos las medidas que se han adoptado para evitar su propagación.
'Las demás emisoras de La Guajira no tienen cobertura en la zona y en muchas comunidades no llega la señala telefónica de Claro, que es el único operador que presta sus servicios allí. Solo cuentan con esta emisora y con una instalada en el corregimiento de Nazaret por parte del Ejército pero es de baja potencia', indica Valbuena.
También explica que para que la emisora funcione con toda la potencia con que cuenta se requieren solamente diez millones de pesos para el mantenimiento de la planta eléctrica, el combustible para 2 meses y la logística de un ingeniero para activar el transmisor de alta potencia. 'Con esa pequeña inversión se pueden salvar muchas vidas pero los gobiernos municipal y departamental se niegan a realizarla y tampoco buscan otra estrategia', asegura.
Añade que las EPS no están haciendo campañas de prevención en las comunidades y el hospital de Nazareth no tiene capacidad para atender una pandemia en una población que entra y sale al vecino país de Venezuela sin ningún control.
'Hay que destacar el trabajo de algunos líderes wayuu que por sus propios medios realizan campañas de prevención en la medida de sus limitaciones', indicó.