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En la búsqueda constante de opciones rápidas y sabrosas para el almuerzo, el pollo a la parmesana se ha consolidado como una alternativa práctica para muchas de las personas que no cuentan con tanto tiempo para cocinar, pero aun así se niegan a dejar de comer algo delicioso.

Esta receta, que combina la suavidad del pollo con la intensidad de los quesos y la frescura del tomate, destaca por su versatilidad y su facilidad de preparación, además de que se trata de una opción más saludable. Y es que, en esta versión adaptada con avena molida, se propone un empanizado más sano sin sacrificar la textura crujiente ni el sabor tradicional.

El protagonismo del tomate en esta preparación no es casual. Originario de los Andes sudamericanos, este fruto ha recorrido un largo camino hasta convertirse en un ingrediente esencial en cocinas de todo el mundo.

Desde su uso ancestral en Perú, Ecuador y Bolivia hasta su adopción por los italianos en el siglo XVI, el tomate ha aportado sabor, color y nutrientes a múltiples platos. En esta receta, se utiliza como base para una salsa casera que realza el aroma de la albahaca y el ajo.

Más allá de su sabor, el pollo a la parmesana preparado de esta forma representa una opción equilibrada. El uso de avena molida en lugar de pan rallado permite incorporar una fuente de fibra y carbohidratos complejos, mientras que las proteínas magras del pollo y las grasas saludables del aceite de oliva crean una propuesta nutritiva y completa. Ideal para compartir en familia o servir como plato principal en un almuerzo especial.

Ingredientes (4 porciones)

Para el pollo:

  • 4 filetes de pechuga
  • 1 taza de queso parmesano
  • 4 lonjas de queso mozzarella
  • 1 taza de avena molida
  • 2 huevos
  • 1 cucharada de mantequilla
  • 4 cucharadas de aceite de oliva
  • Paprika, ajo en polvo, sal y pimienta al gusto

Para la salsa:

  • 5 tomates chontos bien maduros y rallados
  • 1/4 de cebolla blanca
  • 4 dientes de ajo
  • 3 cucharadas de aceite de oliva
  • Sal y pimienta al gusto
  • 3 hojas de albahaca fresca

Preparación paso a paso

  1. Salsa base: en una sartén, calentar el aceite de oliva y sofreír los dientes de ajo triturados junto con la cebolla picada finamente. Añadir el tomate rallado, la sal, la pimienta y las hojas de albahaca. Cocinar a fuego medio hasta que la salsa espese ligeramente.
  2. Empanizado del pollo: en un recipiente, mezclar la avena molida con paprika, ajo en polvo, sal y pimienta. Pasar cada filete por esta mezcla, luego por los huevos batidos y, finalmente, cubrir con queso parmesano.
  3. Cocción: en una sartén amplia, calentar la mantequilla junto con el aceite de oliva. Dorar los filetes empanizados por ambos lados hasta obtener un tono dorado y una textura crujiente.
  4. Montaje y gratinado: cubrir cada filete con una porción de la salsa preparada, colocar una lonja de queso mozzarella y espolvorear más parmesano al gusto. Tapar la sartén y permitir que el queso se derrita completamente. Finalizar con un toque de albahaca fresca antes de servir.