En diciembre de 2016 surgieron rumores de que Carrie, Miranda, Charlotte y Samantha se iban a reunir otra vez para hacer una tercera película de ‘Sexo en Nueva York’. No obstante, casi un año después, no se decía más nada sobre las grabaciones de la supuesta nueva producción.
Varias semanas atrás, Kim Catrall, una de las protagonistas principales de la saga, se había referido a sus excompañeras y su relación con ellas durante el rodaje de la serie. En las declaraciones a canal internacional CNN, la británica comentó que no tiene ninguna intención alguna de volver a ese papel y actualmente está pensando en planes personales para el futuro.
Días después,durante una entrevista con Piers Morgan, la actriz aseguró que nunca consideró amigas a sus compañeras de elenco y el fin de la etapa que ya vivió al terminar la serie.
'Nunca fuimos amigas. Éramos colegas y creo que de alguna manera era bastante sano, porque así se tiene muy clara la línea entre tu vida profesional y personal. El único lugar en común que teníamos era la serie y la serie ya terminó'.
La estrella también afirmó que quiso ser madre a través de la fertilización in vitro, sin embargo, no pudo hacerlo gracias a las extensas horas de trabajo y grabación. Admitió que hubo momentos en los que sintió el instinto maternal al convertirse en mentora de actrices jóvenes. 'Ser como una madre para algunas, eso realmente me ha dado tanto', aseguró.
Viejos rumores aseguraban que Cattrall habría colocado muchas exigencias a Warner Bros para grabar la tercera parte de la saga, de modo que la productora tuvo que cancelar la película. Sin embargo, la actriz también desmintió aquellos rumores durante la entrevista con Morgan; 'Yo nunca pedí dinero, yo nunca pedí ningún proyecto, que me tachen de diva es completamente ridículo'. La actriz confesó que pensó en la oferta como un: 'gracias pero no'.
Se dice que todo el equipo había aceptado participar en la tercera película cuando el proyecto quedó paralizado por las supuestas negociaciones con Cattrall. Sarah Jessica Parker y Willie Garson, que interpretaba al amigo de Carrie, Stanford Blanch, acusaron a Cattrall del fracaso del proyecto y de que, por su culpa, el equipo y los fans se quedaran sin ‘Sex and the City 3’.




















