Economía Atlántico: los agronegocios impulsan el PIB en el departamento

Los resultados de Atlántico en el segundo trimestre del Indicador Trimestral de Actividad Económica Departamental (Itaed) han dado una nueva señal sobre las actividades del producto interno bruto departamental que están ganando peso. Y Luis Humberto Martínez, secretario de Desarrollo Económico del Atlántico, asegura que una de las que está ganando músculo son los agronegocios.

Las inversiones por más de $77.000 millones por parte de la Gobernación del Atlántico y en los distritos de riego en Repelón y los proyectados para Suan y Santa Lucía con las alianzas para promover el desarrollo de cultivos de 1.500 hectáreas en palma africana y 1.110 de limón tahití más plátano y cacao están impactando en generación de ingresos a decenas de familias y promueven empleo directo con un promedio de cuatro personas por hectárea cultivada.

Luis Humberto Martínez asegura que está llegando mano de obra y jornaleros de Bolívar. 'Se ha logrado tener en Repelón corresponsal del Banco Agrario y tenemos un programa como Semillas para la vida que ha beneficiado a 7.000 productores del campo. Éstos han recibido entre $400.000 a $3,5 millones por cosechas producidas. Por eso estamos hablando que se ha logrado una reactivación del campo y está incidiendo en la economía del Atlántico con la rehabilitación de los distritos de riegos que promueve la gobernadora Elsa Noguera de la Espriella'.

El impacto de las inversiones públicas en el sector agro también lo destaca el productor y propietario de seis hectáreas, Edwin Pernett Marengo. 'Repelón ha tenido un cambio. Lo podemos ver en que hay otra estación de servicio de combustibles cuando antes había una. Tenemos una tienda Ara y el acceso al crédito para los cultivadores a través del operador Oleoflores, que con músculo financiero, hemos obtenidos créditos de $28 millones por hectárea cuando antes solo podían darnos solo hasta $8 millones.Lo mejor es que no es una hipoteca y es uno de los acompañantes en lo técnico junto a la Gobernación del Atlántico'.

Estos recursos permiten inicialmente que el productor en los primeros 3 años garantice la siembra y sostenimiento de los cultivos como los que están proyectados en el tiempo de palma africana en Repelón. Otros como el cacao están previstos para siembras en Suan y Santa Lucía.

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Pernett Marengo hace parte de la asociación Asoproli, conformada por 17 campesinos de tradición y vocación de Repelón con predios propios. Asoproli posee más de dos años y seis meses de organización y es una de las 15 asociadas que firmaron la alianza con el grupo Oleoflores, compañía del sector palmicultor de Colombia.

Son 2.200 hectáreas de cultivos de palma africana, limón y plátano proyectadas para producir en las fincas de los campesinos asociados, garantizar la comercialización y compra de los bienes en la alianza estratégica con Oleoflores.

El Sena Atlántico y la Cámara de Comercio de Barranquilla (CCB) se suman al modelo de desarrollo de agronegocios para impactar en la economía departamental con un programa de asistencia técnica.

Luz Elena Álvarez, líder del Sena Emprender Rural Agronegocios, explica que las dos entidades entendieron que el campesino no solo pide formación en mejores prácticas, tecnificación, sino también insumos, fertilizantes, conexiones de valores para sacarlos del campo y que se exhiban en escenarios y vitrinas con sus productos. 'Vender sin que la cadena sea tan larga y sin intermediarios para que con sus bienes tengan presencia en centros comerciales; puedan reunirse con gerentes como el del Banco Agrario y reciban recursos en conexiones de valor'.

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El Sena y la CCB indicaron que son 588 unidades productoras identificadas en agroindustria (con negocios de lácteos, elaboración de bollos arepas, vinos, artesanías), pecuaria (ganado, bovino, porcicultura, avicultura y apicultura) y agrícola (yuca, maíz, limón, melón y mango). De las 588 la mayoría, señala en el Sena, no están formalizadas especialmente porque son pequeñas unidades económicas que privilegian la agricultura familiar y comunitaria. Hay casos muy particulares como el de Ledis Esther Díaz Herrera, de 67 años, propietaria de Lácteos la Rosita SAS que pasó de una microempresa a convertirse en proveedora con ventas públicas de sus productos para el Programa de Alimentación Escolar (PAE) en Sabanalarga.

Hace 14 años, Díaz Herrera comenzó en los agronegocios pequeños invirtiendo $40 mil pesos, comprando 10 litros de leche y vendiendo 8 yogures. Su formación ha sido con el Sena y aunque le dijeron que el Fondo Emprender era muy exigente, ahora dice: 'No es fácil, pero no es imposible. Esto es para amachar y medir el carácter. Ser autosuficiente que es donde muchos no lo aguantan. Ya estoy formalizada con la Cámara de Comercio hace 8 años. Vivo en Campeche, quiero cultivar hortalizas: cilantro, ají en sus presentaciones, col, habichuela, berenjena y promoveré un banco de semillas genéricas'.

Entre los desafíos que tiene la actividad agrícola está el que se garantice la siembra y producción de otros cereales como el millo, que tiene en Juan de Acosta una tradición y propuestas para agronegocios.

Eduarda Madera Cerpa, vive en Piojó y prepara quibe, dulces y hasta pizza a base del millo, preparaciones con demanda en Barranquilla, pero dice que no está garantizada la compra del cereal todo el año.

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Otros cultivos como el de ají topito, producidos en el corregimiento de Cibarco, en Baranoa, son otra opción para comercializar en el mercado local y que pueden elevarse a una categoría mayor. Pedro Molina Blanco, de 45 años, y dedicado desde niño al cultivo, asegura que lamentablemente las asociaciones no han podido organizarse en este producto, aunque sí hay otras alrededor del guandul. 'Hace unos días vendí 98 libras de ají en $125.000 y después me enteré que costaba $240.000. Me engañó el comprador. Y aprendí'.

Los agronegocios son una oportunidad para entender la importancia de cuidar los suelos y el aprovechamiento de los materiales orgánicos para los cultivos, generar empleo, promover una cultura de tradición campesina y garantizar la seguridad alimentaria, dice Diego Dulcey, agrónomo pereirano y con producción pequeñas y sostenibles en Piojó.

'El cluster de los de los productos que para mi parecer impactan dentro de los agronegocios son el guandul, el maíz dulce, la habichuela larga, tomate cherry, ají topito que los estoy implementando en la finca. Que sean productos con altos contenidos de proteína como leguminosas y para alimentar aves y bovinos como calabazos que también son proteína humana. Entre los agronegocios también hay que tener presente ese tipo de productos'.

José Pardo Gómez, gerente de la promotora Hacienda Las Flores, explica que en la alianza Oleoflores con las 15 asociaciones tienen cuatro enfoques de asistencia permanente con los distritos de riegos: la explotación de los cultivos productivos, el acceso al crédito, suministro de material vegetal certificado y electrificación.

Con esto se garantiza una agricultura eficaz, tecnificada para la producción y compra de 25 años con precios y contratos fijos y transparentes a los cultivos, precisa Pardo Gómez. En palma son 1.200 hectáreas que tienen inversiones de $35 millones , una producción anual que puede costar los $21.000 millones y 300 empleos generados directamente. En limón tahití son $42 millones por hectárea, el valor anual de la producción es de $59.500 millones y 425 empleos. En plátano son 50 millones por hectárea, $7.500 millones y 75 directos. 'La producción a su nivel máximo está valorada en $88.400 millones anuales', agrega José Pardo.

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Para julio de 2026 se aspira a que con el 60 % de la producción de limón en Repelón las primeras 5 toneladas sean exportadas a Países Bajos. El plátano, que se está utilizando para que después sea sombra de las plantaciones de cacao, en nueve meses llegará a una planta en Mamonal en Cartagena y después será procesado y transformado en materia prima para venderla a Estados Unidos.

La palma africana que ya tiene producción está siendo llevada a la planta de refinación en María la Baja, Bolívar que aporta a la oferta nacional y exterior, precisó José Pardo Gómez.

Dixón Calderón, fundador y CEO de la empresa barranquillera de Health Growers, aseguró que están en negociaciones para exportar productos a base de cannabis como aceites y cremas, ungüentos a clientes de Costa Rica, Francia y Suiza. Esta pequeña empresa que además tiene innovaciones desarrollo de base tecnológica para el campo, genera 10 a 12 empleos directos por sus cultivos de 4 hectáreas en Santo Tomás.

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'Investigamos muchos sobre el negocio, cumplimos los trámites y después de tener cultivos hemos vivido la experiencia de participar en convocatorias de Colciencias, Inmpulsa, Sena para nuestros desarrollos tecnológicos y tenemos 7 prototipos; producimos cremas faciales, aceites y que estamos en proceso con el Invima'.

El mercado para Colombia es aún pequeño y con expectativas de venta anuales de 17 millones de dólares. 'Pero tenemos una posición privilegiada para cultivar y obtener la flor de cannabis que nos permita producir los productos y calidades de 10 % y 20 % que son consideradas super premium', explica Nixón Calderón.