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Cada año cuando termina la temporada festiva de Navidad y Fin de Año y regresa la normalidad, también vuelven las preocupaciones por las deudas, estas son mayores si no se ha hecho un buen manejo del dinero o no se ha gastado de manera prudente con una buena planeación. Este año hay un componente adicional y es que por efecto de la pandemia muchos hogares tuvieron una reducción de los ingresos.

El profesor de la Universidad del Rosario, Alejandro Useche, compara esta situación a un guayabo, pero de tipo económico. 'Es esa época en que ya pasadas las fiestas volvemos al curso normal del año para encontrar que tenemos deudas acumuladas y que gastamos más dinero del que debíamos'.

Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, asegura que el 2021 es un año atípico y la llamada ‘cuesta de enero’ puede ser un poco menos fuerte de lo que se presenta en años anteriores.

'Normalmente la subida de precios en enero y febrero vienen acompañadas de alzas en diferentes tarifas (peajes, matrículas de colegios, entre otros), que usualmente van atadas a la inflación y al salario mínimo', explica.

Lo que sube

Olarte agrega que este mes se va a presentar una modificación importante en los aumentos frente a años anteriores, tal es el caso de las tarifas de los servicios que prestan las entidades públicas como los comparendos, porque mientras anteriormente se actualizaban con base en el salario mínimo (que este año subió 3,5%), se decretó que se hará con el IPC.

'Seguramente la inflación va a terminar entre un 1,4% o un 1,5%, entonces el alza del salario mínimo está siendo mayor al alza de lo que normalmente se indexa a la economía o aumentan los precios por cuenta de estas tarifas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que todavía no están claras las matrículas de colegios y la actualización de algunos peajes', indica Olarte.

Adicionalmente se debe recordar que termina la congelación que se había realizado hasta diciembre del 2020 del valor del kilovatio hora de energía consumida, por lo que en este mes se ajustará su valor. Igualmente, subirán los otros servicios públicos.

Medidas de ahorro

Frente a este panorama lo que se debe tener en cuenta es el ingreso permanente, es decir, ese dinero que regularmente nos entra, también se debe propender por dejar siempre una porción importante para ahorro.

Según los expertos, el primer consejo para abordar la crisis financiera es sentarse con el grupo familiar para hacer un diagnóstico de cuál es la situación. La recomendación es hacer este ejercicio de manera muy calmada y con cabeza fría, identificando cuáles son los ingresos y activos del hogar, pero también las deudas que se tienen.

Seguidamente, a quienes viven el guayabo de enero se les recomienda buscar fuentes adicionales y novedosas de ingresos. 'Si tiene un empleo, debe cuidarlo, pero no está de más analizar la posibilidad de buscar un ingreso adicional sin sacrificar la atención al empleo actual', dice Useche.

En el caso de quienes tienen un alto endeudamiento se recomienda buscar ponerle un alto. En las finanzas personales si una persona está muy endeudada se procura recortar gastos en la medida de lo posible, sin que esto sea un sinónimo de sacrificar temas vitales para la familia. Si la persona se da cuenta que no puede cumplir adecuadamente con sus compromisos, debe hablar y tratar de buscar acuerdos de pago con sus acreedores, lo cual puede aliviar su situación.

Adicionalmente, también se aconseja elaborar una lista de los gastos que se hacen periódicamente en el hogar, para no gastar más allá de lo que es prudente, evitar incurrir en los gastos hormiga (son pequeños, pero afectan el flujo de caja) y buscar alternativas para reducir los gastos. 'Se pueden buscar alternativas con el plan de televisión e internet, que sean más baratas, cambiar productos a marcas con precios más favorables, comparar precios y optimizar gastos', asegura el experto.

Uno de los problemas financieros que se han identificado es que a final de diciembre y comienzos de enero las personas se llenan de buenas intenciones (ahorrar, pagar deudas, bajar gastos), pero pasado un tiempo estas se diluyen y no se alcanzan a cumplir las metas fijadas. 'Hay que hacer un diagnóstico, un plan, fijar unas metas y ser muy disciplinados con el cumplimiento, evitando el sobreendeudamiento, recortar gastos innecesarios sin perjudicar la calidad de vida y buscar fuentes complementarias de ingresos', sostuvo Useche.