Tras finalizar el Consejo de Seguridad realizado en Popayán debido a los recientes ataques perpetrados por el EMC - Estado Mayor Central- a las Fuerzas Militares, el ministro de Defensa Iván Velásquez ofreció una recompensa de hasta $500 millones por información que permita dar con la captura de los máximos cabecillas del grupo guerrillero.
Además, el funcionario anunció $100 millones por los responsables del atentado en Morales, Cauca, que dejó dos policías muertos y tres heridos.
Velásquez explicó el motivo de estos ataques del grupo armado.
“No es por una debilidad de nuestras Fuerzas Militares y de Policía sino por el contrario, debido a las acciones que se adelantan en el departamento después de la suspensión del cese al fuego con el EMC. Las acciones permanentes con importantes resultados que han adelantado, han generado el propósito de este grupo armado de contrarrestar las acciones que se vienen adelantando en su contra”, dijo el mindefensa.
Y agregó: “Las operaciones contra la minería ilegal y el narcotráfico han afectado las finanzas de esa organización. Las acciones militares que se vienen adelantado contra la estructura han determinado esta reacción, que insisto, obedece a la contundencia de nuestra fuerza pública”.
Sobre estos hechos, el presidente Gustavo Petro indicó que 'la ofensiva contra el EMC en el Cauca es total'.
'Es inaceptable la situación en el Cauca. No toleraremos que se siga atemorizando a la población con atentados terroristas. Le he pedido al ministro de Defensa (Iván Velásquez) que se desplace de inmediato con toda la cúpula militar al Cauca y se instaure un consejo de seguridad permanente', expresó Petro en la red social X.
Los criminales, que al parecer son miembros del dividido Estado Mayor Central (EMC), hostigaron durante unas dos horas la estación policial de Morales y en ese ataque murieron los patrulleros Jaime Andrés Calderón Reyes y Diego López Domínguez, mientras que otros tres uniformados resultaron heridos.
El gobernador del Cauca, Octavio Guzmán, aseguró que el ataque con disparos de fusil refleja que 'la opción de paz se diluye con las balas, el odio y el resentimiento de los actores armados en nuestro territorio'.
'Hay hostigamientos en los municipios de Morales y Suárez, afectando a la población civil y fuerza pública. Apoyamos de forma irrestricta a las Fuerzas Militares, pero necesitamos con urgencia intervención internacional y buscar el diálogo con un cese bilateral', añadió Guzmán en X.
Las víctimas mortales fueron identificadas como Jaime Andrés Calderón Reyes y Diego David López Rodríguez.
Presuntos integrantes del frente ‘Jaime Martínez’ del Estado Mayor Central, la mayor disidencia de las Farc, atacaron en la mañana la estación de Policía de esta población con ráfagas de fusil y explosivos.
Además, volaron con explosivos un cajero del Banco Agrario y robaron alrededor de 50 millones de pesos.
Ante esto, la respuesta de las fuerzas de seguridad incluyó, entre otras estrategias, el despliegue de dos helicópteros de apoyo: un Huey del Ejército y un UH-60 de la Policía.
Sin embargo, de acuerdo con lo que se conoció, este último fue impactado durante la operación, aunque no hubo heridos entre el personal, según reportaron las autoridades. El helicóptero fue retirado de la zona y reemplazado por un Black Hawk para continuar brindando apoyo aéreo en la zona de los ataques.
El director de la Policía, general William René Salamanca, y el comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Giraldo, sostuvieron un diálogo en el que se acordó un plan de acción para frenar la escalada de violencia. En paralelo, las disidencias hostigaron al personal que llegaba a Morales para apoyar, además de atacar la base del Ejército ‘La Salvajina’ en Suárez, buscando impedir que estas tropas brindaran apoyo.
