Carlos Alfonso Rosero presentó su renuncia oficial al presidente Gustavo Petro Urrego. El anuncio se realizó desde la Isla de San Andrés, coincidiendo con la conmemoración del Día de la Emancipación Raizal, fecha que recuerda la lucha libertaria de los pueblos afrodescendientes en 1834.
Durante su gestión de cinco meses, Rosero implementó cambios estructurales significativos en el ministerio. Según el documento presentado su administración se caracterizó por consolidar la institución como un espacio inclusivo para los movimientos sociales y las comunidades históricamente marginadas, abarcando los 14 sectores poblacionales bajo su jurisdicción.
Le recomendamos: Para la congresista estadounidense María Elvira Salazar la condena contra Uribe es una “infamia”
El exministro destacó la implementación de un sistema de gestión anticorrupción basado en la norma ISO 37001, medida que calificó como fundamental para proteger el presupuesto ministerial de prácticas corruptas y garantizar que los recursos lleguen efectivamente a las poblaciones vulnerables.
La reorganización administrativa constituyó uno de los ejes centrales de la gestión de Rosero. Esta reestructuración buscó reorientar el gasto público hacia los sectores más necesitados, mientras se fortalecían las alianzas interinstitucionales con gobiernos locales, departamentales, nacionales e instancias de cooperación internacional.
Frente a los cuestionamientos sobre la pertinencia del ministerio, Rosero defendió su existencia como herramienta crucial para abordar las desigualdades históricas colombianas. Como parte de esta defensa institucional, su administración radicó un proyecto de ley ante la Cámara de Representantes y consolidó un equipo de trabajo de más de 500 funcionarios públicos y contratistas.
En su carta de renuncia, Rosero reconoció que persisten desafíos importantes en la implementación integral de los cinco viceministerios y los 24 programas que componen la estructura ministerial. El exministro subrayó que dos años de funcionamiento resultan insuficientes para revertir más de dos siglos de exclusión estructural en Colombia.
“Dos años desde que se puso en funcionamiento el ministerio, no bastan para superar 200 años de atraso y desigualdad”, expresó Rosero en su misiva, reconociendo la magnitud del desafío institucional.
Le sugerimos leer: La reflexión de Petro en redes que relacionan con la condena a Álvaro Uribe: “Encarcelado en su propia hacienda”
En la parte final de su carta, dirigida directamente al presidente Petro, Rosero reafirmó su compromiso con las transformaciones sociales que requiere el país, más allá de su paso por el cargo ministerial. Agradeció la confianza depositada y el acompañamiento de los pueblos y comunidades durante su gestión.
“Carlos Rosero fue ministro de Igualdad y Equidad por cinco meses, pero mi vida seguirá empeñada en lograr las transformaciones que Colombia necesita”, concluyó el exfuncionario.