El abrazo de paz entre los exjefes de las Farc y las AUC en Cesar
‘Solís Almeida’, excomandante del frente 41 de las Farc, y ‘Tolemaida’ excabecilla paramilitar del Bloque Norte, pidieron perdón a las víctimas por sus acciones en el conflicto y revelaron verdades de lo ocurrido en el mismo, esto durante el Encuentro ‘Hablemos de verdad’ que se llevó a cabo este jueves en Valledupar.
En un acto de reconciliación y paz, el excomandante del frente 41 de las Farc, Abelardo Caicedo, alias Solís Almeida; y el excabecilla del Bloque Norte de las Autodefensas, Óscar José Ospino Pacheco, alias Tolemaida, se fundieron en un abrazo que fue ovacionado durante el encuentro ‘Hablemos de Verdad’ realizado este jueves en Valledupar por Colombia 2020 y su capítulo Colombia en Transición, apoyado por la Embajada de Alemania en Colombia, en asocio con la Unión Europea.
Los dos fueron invitados al evento para que respondieran por hechos ocurridos en el marco del cruento conflicto que en el departamento del Cesar dejó más de 300.000 víctimas, casi el 30% de los habitantes en este territorio. Allí ante un auditorio, vestidos de blanco, reconocieron sus errores y pidieron perdón.
“Aprovecho este momento para, aquí en el Cesar, pedir perdón por las acciones victimizantes que hayamos podido realizar nosotros como organización”, dijo Almeida; mientras que Tolemaida indicó que “la gran vergüenza de las AUC son las masacres, jamás debieron ocurrir”, al calificarlas como injusticables.
Indicó que sucedieron en medio de la dinámica de la guerra, en la que infortunadamente resultó afectada la población civil. “Nos arrepentimos por estos hechos”, dijo el exjefe paramilitar que en el pasado sembró terror en el Cesar.
Entre las verdades que confesó dijo que “en el conflicto, uno hace tácticas de estudio al enemigo, a sus redes de apoyo y colaboradores, y en su momento uno creía que mucha gente lo era, sobre todo del ELN, debido a que los guerrilleros se camuflaban entre la población civil que terminó vinculada en esa confrontación, sin ser parte de ella”.
Óscar José Ospino Pacheco, fue uno de los principales ex lugartenientes del extraditado Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40, se desempeñó como comandante del frente Juan Andrés Álvarez, que delinquía principalmente en el centro del Cesar, cometiendo masacres, asesinatos selectivos, desplazamiento y desapariciones forzadas, siendo los municipios más afectados Bosconia, La Jagua de Ibirico, El Paso, Chiriguaná, Becerril, Codazzi y La Paz.
‘La verdad es dolorosa’
Tolemaida dijo que “es muy difícil contar la verdad, porque es dolorosa”. Incluso el exjefe paramilitar se abstuvo de entregar detalles a preguntas de familiares de las víctimas concentradas ayer en el auditorio del hotel Sonesta donde se realizó el encuentro, indicando que existen restricciones para revelar información por los procesos que se adelantan en Justicia y Paz.
Igualmente lo manifestó Solís Almeida, quien precisó que no es fácil contar lo ocurrido en más de 50 años del conflicto. Este ex comandante de las Farc, quien estuvo 40 años en la guerrilla, contó sin embargo que muchos de los ataques a fincas obedecieron a una estrategia de guerra para debilitar financieramente a quienes colaboraban con los paramilitares.
Precisó que la población civil quedó en medio del conflicto sin que fuera su propósito. “Había zonas por donde estaba la guerrilla, entonces uno le pedía algún favor a los campesinos, y lo hacían a veces por temor, porque es muy diferente cuando ese favor lo pide gente armada, entonces el enemigo pensaba que ya era colaborador nuestro”.
Solís Almeida sostuvo que básicamente el origen del conflicto se da por la ausencia del Estado, cuando surge una lucha por tratar de lograr un cambio social.
